El magistrado Sidney Blanco aseguró que el gobierno busca ocultar sus fracasos al culpar a la Sala de lo Constitucional por la falta de financiamiento para solventar las necesidades de la población.
El jurista detalló que si bien la Sala de lo Constitucional ha detenido con resoluciones algunos impuestos o aprobación de bonos, no es la responsable del manejo de los recursos del Estado; por lo tanto, el gobierno es el responsable si no hay medicamentos en hospitales, escuelas dañadas y exigencias ciudadanas no cumplidas.
“La Sala parece ser el objetivo para ocultar los fracasos. Lo fácil es culpar a la Sala”, dijo Sidney Blanco en la entrevista matutina de la radio Fuego 107.7.
El funcionario judicial aclaró que los diputados tienen la facultad de modificar los decretos declarados inconstitucionales y adecuarlos a la Carta Magna; es decir, son los parlamentarios los encargados que el gobierno tenga los recursos financieros que necesita.
Sin embargo, Blanco dijo que los magistrados de la Sala de lo Constitucional están preocupados por los últimos ataques contra la dependencia que integran y principalmente porque algún fanático pueda agredirlos físicamente.
“Hemos hablado de la posibilidad de que aparezca un fanático que se extralimite al grado de agredir físicamente a cualquiera de nosotros y esos fanáticos en El Salvador abundan”, reiteró el magistrado ante los ataques contra la Sala de lo Constitucional.
El funcionario descartó que la Sala de lo Constitucional sea la responsable de la delincuencia, falta de medicamentos, los problemas financieros del gobierno, de la poca confianza para invertir en el país y de otros fracasos de la gestión del presidente Salvador Sánchez Cerén.
El domingo, monseñor José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador, dijo que los ataques del partido de gobierno y de organizaciones sociales contra las resoluciones de los magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte de Suprema de Justicia (CSJ) son condenables porque no contribuyen a la democracia en el país.
Para el jerarca católico, los llamados que hacen los actores políticos y sociales a la confrontación a favor o en contra de los magistrados son peligrosos para la sociedad.
“Si no estamos de acuerdo con alguna resolución, debe debatirse de forma civilizada, no a través de ataques”, explicó Escobar Alas durante la conferencia de prensa dominical, realizada en Catedral Metropolitana.