El exmandatario Mauricio Funes ha explicado que su seguridad y la de su familia fue el principal factor que lo llevó a solicitar asilo político en Nicaragua, ya que considera que existen planes de la extrema derecha para atentar contra su vida y la de sus familiares.
Según el expresidente, existe una “venganza” política en su contra, debido a que denunció el caso de corrupción de los $10 millones de dólares otorgados por el Gobierno de China (Taiwán) durante el período presidencial de Francisco Flores.
Para el analista político, Óscar Godoy, el asilo otorgado a Funes es una respuesta a la amistad entre el FMLN y el Frente Sandinista, partido del presidente Daniel Ortega, mas que de un favor hacía el expresidente. Por lo tanto, descarta que Nicaragua le brinde una mejor seguridad que en su propio país.
“La decisión de asilarse no ha sido propia. Fue obligado a estar asilado. Para el FMLN, Funes está mejor allá en Nicaragua que en El Salvador”, aseguró el analista en el programa 8 en punto, de canal 33.
Godoy no descarta que el exmandatario, al verse acorralado, revele otros casos de corrupción donde estén vinculados miembros del partido FMLN y diputados de otros partidos políticos. «El señor Funes lejos de ser un prócer terminó siendo un transgresor de la ley», agregó.
El primer presidente del FMLN está siendo investigado por la Fiscalía General de la República (FGR) por los delitos de enriquecimiento ilícito, malversación, negociaciones ilícitas y tráfico de influencias durante su mandato.