Antes que la Cámara Segunda de lo Civil concluyera la audiencia preparatoria por indicios de enriquecimiento ilícito contra Mauricio Funes y su exesposa Vanda Pignato, el abogado del expresidente, Enrique Araujo, aseguró que su cliente ejercerá su propia defensa.
Funes no se presentó a la audiencia que abarcó dos días, por encontrarse en Nicaragua bajo protección del gobierno de dicho país, el cual lo considera un perseguido político, a raíz de una serie de allanamientos emprendidos por la Fiscalía General de la República a varias de sus casas, para comprobar si existen indicios de que haya cometido delitos de corrupción en su mandato.
No obstante, según fuentes judiciales, la oferta planteada por el abogado Enrique Araujo consiste en que Funes podría rendir declaraciones de manera virtual desde Nicaragua.
“Hay medios técnicos para rendir declaraciones, vamos a analizarlo”, dijo el defensor legal de Funes, en unas escuetas declaraciones a la salida de la Cámara Segunda de lo Civil.
“Se le va a citar (a Mauricio Funes) a través de su defensor y estaremos a la espera, a ver si es cierto que él viene a testificar”, mencionó por su parte una de las fiscales del caso.
El ex jefe de estado asevera que existe un plan de la “extrema derecha” salvadoreña para atentar contra su vida y la de su familia, a manera de “venganza política” por destapar durante su mandato, varios casos de corrupción ocurridos durante los gobiernos del partido ARENA.
Al primer día de audiencias compareció la exesposa de Funes y actual secretaria de Inclusión Social, Vanda Pignato, cuyo abogado manifestó que ella nunca fue investigada por la Sección de Probidad de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), sino que el único investigado es Mauricio Funes.
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La Cámara concluyó este martes la audiencia preparatoria y llamó a las partes el próximo 20 de septiembre para establecer cuales pruebas son las que admite y si el proceso pasa o no a una audiencia probatoria.
Mauricio Funes, Vanda Pignato y Diego Funes Cañas, hijo del expresidente, enfrentan este proceso a raíz de las irregularidades encontradas en la declaración patrimonial del cese de funciones del exgobernante, en la que no pudo explicar utilidades por más de $720,000.
De acuerdo a la Fiscalía, existe un incremento patrimonial que durante la gestión presidencial de Mauricio Funes no fue justificado y que asciende a $728,329.74, mientras que el incremento patrimonial de Vanda Pignato sería de $57,000.
Otra de las irregularidades señaladas por la Fiscalía es la compra de automóviles de lujo por parte de Diego Funes Cañas, las cuales no aparecen justificadas en la declaración patrimonial del exmandatario.
Según la parte defensora, la madre de Diego Funes Cañas, la personalidad de televisión Regina Cañas, presentó una declaración jurada en la que constata que ella otorgó a su hijo dinero de un préstamo por $95,000 para que él comprara los vehículos.
Aunado a la audiencia, la Fiscalía volvió a allanar nuevas propiedades relacionadas con el expresidente, entre ellas una casa en la colonia Maquilishuat de San Salvador en la que operó un spa que sería propiedad de Mitchell Guzmán, actual compañera de vida de Funes.
Andrés Amaya, Fiscal de la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía, indicó que los allanamientos continuarán y luego se llevarán las pruebas recabadas ante las autoridades.