El presidente Salvador Sánchez Cerén dijo que no le preocupa que le pregunten cuánto gasta en montar cada fin de semana su programa Gobernando con la Gente. La Unidad de Información de Casa Presidencial, sin embargo, negó esa información a un medio de prensa escrito que la solicitó.
«Me comprometí a hacer un gobierno transparente», recordó el mandatario segundos después de expresar su despreocupación. Aseguró, además, que el programa es «para el pueblo».
También dio a conocer que la idea de no vivir en la Residencial Presidencial sino de ocuparla para encuentros artísticos y culturales fue idea de su esposa Margarita Villalta de Sánchez.
El mandatario también aseguró que el gobierno del FMLN no pretende construir otra Cuba sino una sociedad propia basada en la realidad nacional. «Nuestra filosofía es trabajar por el buen vivir, alcanzar la máxima felicidad, es una ilusión, un sueño, los que no sueñan están muertos y debemos estar vivos para engrandecer al país», comentó.
Afirmó, asimismo, que él y sus funcionarios se sienten optimistas con el rumbo que lleva El Salvador, principalmente, con el crecimiento económico que, según sus cuentas, en 2015 ha sido uno de los más pujantes de América Latina gracias al crecimiento de las exportaciones y la disminución de las importaciones.
Muestra de ello, señaló, es que el año pasado el crecimiento del PIB alcanzó el 2% y 2015 cerrará con 2.4%. «Nos sentimos satisfechos aunque instituciones empresariales consideran que el país no ha avanzado», reiteró. Pero el crecimiento no basta, aclaró, sino que debe distribuirse la riqueza a través de programas sociales enfocados en el mejoramiento de los servicios de educación y salud. Agregó también que la inversión privada es mayor. «Los empresarios invierten más porque los salvadoreños tienen más recursos», señaló.