Grupos que aseguran luchar contra la corrupción y la impunidad convocaron a manifestaciones paralelas en las Plazas Salvador del Mundo y Beethoven en las que exigieron la instalación en El Salvador de una comisión internacional contra la impunidad y la investigación de desfalcos al Estado supuestamente cometidos en las administraciones presidenciales de Alfredo Cristiani, Armando Calderón Sol, Francisco Flores y Elías Antonio Saca de ARENA.
Desde las tres de la tarde en la Plaza Salvador del Mundo se concentraron sindicatos y organizaciones cercanas al FMLN para recordar los actos de corrupción que supuestamente cometieron los funcionarios del ahora principal partido de oposición. En la manifestación muchos llegaron con sacos con símbolos de dólar y máscaras del expresidente Flores, que está en arresto domiciliario acusado del desvío de $15,000, 000 de la cooperación de Taiwán entre 2003 y 2004 que terminaron en las arcas de ARENA durante la campaña de Saca; de la diputada Ana Vilma de Escobar a quien sobre quien pesa una investigación por el manejo irregular de un fideicomiso que iba a servir para incentivar la inversión privada; de Guillermo Sol Bang, expresidente de la CEL que recientemente fue absuelto por la privatización progresiva de LaGeo que estaba en manos de la italiana Enel; entre otros.
“¡No queremos más corrupción ni impunidad; cárcel para Francisco Flores!”, gritaban los manifestantes.
Después de las cuatro de la tarde hubo otra manifestación en la Plaza Beethoven. En ella participaron el grupo De Cinco en Cinco que reclamaron más al Gobierno de Salvador Sánchez Cerén que pida a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) una comisión como la CICIG que funciona en Guatemala y ha llevado a la cárcel al expresidente Otto Pérez Molina y a la exvicepresidenta Roxana Baldetti por corrupción en las aduanas; el fortalecimiento de la Fiscalía General (FGR) para que pueda investigar independientemente todos los delitos que se cometen en el país; el uso adecuado de los impuestos; y la erradicación de la violencia que se traduce en más de 20 homicidios diarios.
También señalaron que la clase política se aprovecha de los impuestos que recauda el Estado para enriquecerse, que despilfarra el dinero de todos los contribuyentes en vez de mejorar los salarios de los policías y soldados que cada día se enfrenta a las pandillas y otros criminales.
Esta no es la primera vez que ambos grupos miden fuerzas. El 5 de septiembre unos manifestantes cercanos al oficialismo irrumpieron en la Plaza Beethoven con cárteles del expresidente Flores y exigieron investigar la corrupción de las administraciones pasadas pero los manifestantes se sintieron provocados y hubo choques que paró rápidamente la Policía Nacional Civil (PNC). Un día después José Luis Escobar Alas, arzobispo de San Salvador, criticó ese enfrentamiento, lo calificó como “juego de insultos de poca monta, de mal gusto” y aclaró que no estaba a favor de uno ni otro sino por el fortalecimiento institucional y la creación de códigos de ética para frenar los delitos de cuello blanco.