La semana pasada el Viceministerio de Transporte mandó a la Asamblea Legislativa una recomendación: avalar por un año más la circulación de buses que tienen 20 años de antigüedad, dio a conocer Carlos Reyes, diputado de ARENA.
La respuesta llegó a la comisión de Transporte de la Asamblea. Los diputados todavía no han estudiado la posibilidad pero ya toman como parámetro de análisis dos condicionantes: ¿Qué pasaría si sacan de circulación buses de esa edad en zonas rurales que son el único medio de transporte? ¿Pueden seguir en las calles unidades que contaminan tan intensamente la calidad del aire? En esos extremos oscilará el debate.
Margarita Rodríguez, diputada del FMLN, consideró que es necesario atender el llamado de Lina Pohl, ministra de Medio Ambiente, que el fin de semana pasado en una publicación de La Prensa Gráfica advirtió que podía sacar de las calles a las unidades más dañinas para la población auxiliada en un estudio de la calidad del aire que presentó el 4 de junio en el que señalaba que el transporte colectivo representa el 2% del total de vehículos que circulan en el Área Metropolitana de San Salvador (AMSS) pero es el causante de más del 50 por ciento de la contaminación del aire que respiran los salvadoreños.
El nivel de “muy dañino”, como ha sido calificado el aire en las arterias vitales del Gran San Salvador, está en un paso previo a las 400 partículas de contaminación que países como México ha sufrido. En ese momento es cuando el ambiente está tan enrarecido que hasta los pájaros caen muertos de las ramas. Ese día Pohl pidió a los diputados un plazo para retirar las unidades.
“Hay que valorar otros mecanismos como exigir la revisión, la condición porque hay buses de menos edad que generan mucho humo”, afirmó la diputada efemelenista.
Según Carlos Reyes es necesario hacerse preguntas como: ¿Hace su trabajo el FOVIAL de reparar las calles? ¿El Viceministerio multa o exige las revisiones anuales a las unidades, tal como lo establece la ley de Transporte?
“Si va quedarse sin transporte la gente no vamos a aprobar que se saquen de circulación”, opinó después de presidir la comisión legislativa.
El 14 de agosto de 2014 la Asamblea aprobó, con 49 votos a favor y cuatro en contra, que los buses con más de 20 años de antigüedad pudieran renovar las licencias de circulación y los permisos de línea. Anteriormente las había avalado pero el Ejecutivo objetó que no podía pagarles el subsidio porque podía entrar en contradicción con el artículo 10 de la ley Transitoria para Estabilización de Tarifas que establece parámetros de modernización.
David Reyes, diputado del principal partido de oposición, se opuso a la prórroga porque consideraba que es ir en contra de la modernización del transporte, se pone en riesgo la vida de los pasajeros y continuará la discriminación hacia las usuarios con discapacidades.