El presidente Salvador Sánchez Cerén aseguró que la decisión de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema (CSJ) de frenar la emisión de $900,000, 000 en bonos obligará al Estado a incumplir sus responsabilidades en el pago de acreedores.
La primera afectación, según el mandatario, caerá en la seguridad ya que el Gobierno no podrá invertir los $100 millones que había previsto para combatir la criminalidad. “Por decisión de cuatro magistrados que no piensan en el país”, comentó.
El mandatario contó que Rafael Barraza, presidente de Bancolombia en El Salvador, le había dicho que la emisión del millonario monto recibió 200 ofertas de compradores. Ahora, sin embargo, la credibilidad del país ante inversionistas extranjeros puede caer.
“No quieren que invirtamos en el país, eso tiene repercusiones; vamos a incumplir nuestras responsabilidades”, expresó en el programa Gobernando con la Gente que se desarrollaba en Nahuizalco, Sonsonate.
El mandatrio también criticó la resolución que emitieron los magistrados José Belarmino jaime, Florentín Meléndez, Sidney Blanco y Rodolfo González en la que prohibieron la publicación de los listados de morosos con el Ministerio de Hacienda. La calificó como “injusta” porque consideró que les permite evadir impuestos.
“La gente más pobre es la que paga impuestos pero los ricos evaden. ¿Creen que es justo? ¡No lo es!”, dijo Sánchez Cerén. Agregó, además, que las resoluciones pretenden amarrar económicamente al Gobierno para que pueda desempeñarse adecuadamente. “Sus acciones responden a los intereses de grupos economicamente dominantes y al partido ARENA”, concluyó.
A principios de la semana la Sala de lo Constitucional frenó la emisión de $900 millones por supuestas irregularidades en la aprobación del decreto que la Asamblea Legislativa emitió el 23 de abril.
El FMLN ha considerado que los magistrados pretenden cerrar las fuentes de financiamiento del Gobierno para ahogarlo económicamente. Medardo González, secretario efemelenista, dijo que la Sala se está llevando a la gestión de Sánchez Cerén “entre las patas”.