El presidente Salvador Sánchez Cerén aseguró que desde que asumió su cargo la PNC ha capturado a más de 10,000 pandilleros. A eso lo ha calificado como la mayor acción antidelincuencial ejecutada por un gobierno desde la firma de los Acuerdos de Paz.
El presidente señaló que El Salvador necesita aumentar la carga impositiva, es decir, los impuestos que paga el gran capital para lograr frenar la criminalidad y caminar al desarrollo. Mientras tanto ha pedido al ministro Benito Lara que enfoque adecuadamente los recursos financieros.
“No existe un país que se desarrolle con una carga impositiva tan baja”, dijo en el XV Encuentro de la Empresa Privada (ENADE) en la que el exalcalde Rudolph Giuliani le entregó los resultados de una auditoría sobre seguridad.
“Combatimos la delincuencia con todos los instrumentos legales y coercitivos”, aseguró el mandatario refiriéndose a la próxima creación de tres batallones especiales de la Fuerza Armada para combatir pandillas, el traslado de cientos de pandilleros a otras cárceles en las que estrarán recluidos con sus enemigos, entre otros.
En su discurso pronunciado ante empresarios, políticos e invitados extranjeros, el presidente se dedicó a recordar que su gobierno se ha dedicado a atraer inversiones para alcanzar un desarrollo mayor al 3% del PIB a finales de 2015 y de esa manera reactivar la economía que desde 2008 es una de las más bajas de América Latina.
Aprovechó también para afirmar que los ingresos del turismo han crecido en los últimos meses y han reportado unos $1,000 millones en ingresos para El Salvador.
Jorge Daboud, presidente de la ANEP, cuestionó el discurso oficial que habla de “buen vivir” mientras todos los días la ciudadanía ve noticias de homicidios, robos, violaciones y otros flagelos atribuidos a las pandillas.
Con la presentación de las propuestas de Giuliani, señaló el líder gremial, pretenden ayudarle al Estado a cumplir su rol de combatir el crimen pero también de prevenir y rehabilitar a quiénes han cometido ilícitos.
“En las extremas condiciones de seguridad el buen vivir tiene pocas probabilidades de convertirse en realidad. ¿Cómo puede la gente de gozar de bienestar si no está segura ni en su propia casa?”, criticó Daboud.
Por eso, comentó, es necesario liberar al país “de la prisión” en la que está como consecuencia de la violenta guerra que libran el Barrio 18 y la Mara Salvatrucha y que el año pasado costó cunos $500,000, 000 tanto en pago de policías como en empresas de seguridad privada.
Recordó, asimismo, que detrás de cada víctima hay una madre que perdió a su hijo, un hijo que queda huerfano y un drama que irreductible.
“Ahora damos una propuesta que puede ser la salida al oscuro túnel. Confiamos en que el buen juicio les haga tomar en cuenta el aporte”, concluyó Daboud.