Un conato de disturbios se originó esta tarde frente a las instalaciones del Centro Internacional de Ferias y Convenciones (CIFCO) entre la Policía Nacional Civil (PNC) y periodistas, quienes tratan de cubrir el escrutinio final que se ha paralizado.
Alrededor de las 11:30 de la mañana, varias Juntas Electorales Departamentales suspendieron el trabajo para tomar un descanso y almorzar. A las 3:00 p.m., la fiscal electoral, Rosa Evelyn Alvarado, desmintió que la Fiscalía estuviera bloqueando el escrutinio.
“Son ellos (la JED) los que pararon el trabajo (de la FGR), al no contar con las actas que proporciona el TSE”, dijo Alvarado quien explicó que los 59 fiscales están a tiempo completo.
Posteriormente, agentes de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO) se apostaron en la entrada del salón de CIFCO donde se lleva a cabo el escrutinio e impidieron el ingreso de la prensa, luego que uno de los dirigentes de ARENA, Gerardo Suvillaga, intentara abrir las puertas para que ingresaran los periodistas.
Suvillaga denunció que el TSE no había iniciado con el escrutinio final. «Las actas no han venido del tribunal, yo les pediría que pasen porque como prensa están invitados a pasar, la Policía no tiene nada qué hacer aquí, absolutamente nada, porque ustedes no son delincuentes», les dijo a los periodistas.
Agentes de la UMO en la entrada del salón del CIFCO donde se realiza el escrutinio final.
Algunos miembros de Juntas Electorales Departamentales, como la de Sonsonate, se retiraron del salón de CIFCO donde se lleva a cabo el escrutinio porque este no se ha reanudado.
Esta situación se suma a la tensión que hay por el lento conteo de los votos, las denuncias de sabotaje que ha hecho el presidente del TSE, Julio Olivo, y las exigencias de algunos partidos como ARENA de que se agilice el escrutinio final.
Por su parte, el presidente del Consejo Ejecutivo Nacional de ARENA (COENA), Jorge Velado, dijo que “a estas alturas no podemos más que dar fracasada esta etapa (del escrutinio) del Tribunal Supremo Electoral”.
Mientras, el director de la Policía Nacional Civil (PNC), Mauricio Rámirez Landaverde, quien estaba presente en el conato de disturbio, señaló que «como policías estamos dándole cumplimiento a lo que las autoridades electorales nos han requerido. Nuestra responsabilidad será garantizar el escrutinio final».
El magistrado Fernando Argüello Téllez aseguró que el Tribunal busca superar los “inconvenientes” que se han presentado. Entre los problemas suscitados están la impresión de documentos y sustituciones de personal de mesa a última hora.
Dijo que plantearán la necesidad de sostener una reunión con los partidos políticos para bajar las tensiones, ya que estas podrían ocasionar una crisis. El TSE trabaja en la normalización del escrutinio, indicó.
El magistrado Miguel Ángel Cardoza, asimismo, sostuvo que “hemos notado que no están algunos miembros de JED; la gente está cansada, estamos tratando de restablecer el escrutinio…”.
Cardoza afirmó que no tiene ningún informe sobre la denuncia de boicot hecha por Julio Olivo, pero que como organismo electoral acordaron se inicie la fase de investigación para determinar si hubo algún delito.
A las 6:30 p.m. todavía no se había reanudado el escrutinio.