El presidente Salvador Sánchez Cerén se pronunció este sábado tras la admisión que hiciera la Sala de lo Constitucional de un recurso que invalidaría la recién aprobada reforma tributaria.
“Todos los países de Centroamérica tienen una carga tributaria del 17%, Costa Rica tiene el 25%. Nosotros estamos en la lógica de buscar justicia tributaria”, expresó el mandatario durante el programa Conversando con la Gente.
Sánchez Cerén explicó que la reforma no afecta a la gente más pobre del país, sino a los bancos que realizan distintas transacciones.
“Es al sistema bancario a quien se le aplica. Miren los bancos cómo han reaccionado, comunicados por todos lados. Y han presentado a la Corte un recurso de inconstitucionalidad de la reforma y esa reforma nos va a dejar por lo menos 100 millones de dólares para impulsar un desarrollo integral”, manifestó.
Representantes de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) han criticado la reforma fiscal asegurando que «está hecha para favorecer a los negocios de ALBA».
En reiteradas ocasiones indicaron que interpondrían un recurso ante la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
La Sala de lo Constitucional admitió este viernes una demanda de inconstitucionalidad contra la nueva Ley de Impuesto a las Operaciones Financieras que aprobada por la Asamblea Legislativa.
Aunque no suspendieron los efectos de esa ley, los cinco magistrados de esa sala se disponen a examinar la constitucionalidad de los nuevos impuestos porque podrían mostrar “vicios de forma” si la propuesta no se discutió, abiertamente, en la Asamblea Legislativa.
El problema, según Salvador Orellana Sánchez, el ciudadano salvadoreño que estableció el recurso de inconstitucionalidad, es que las nuevas disposiciones tributarias se aprobaron una noche, sin la discusión necesaria fijada en los procedimientos del Congreso.
Los magistrados adelantaron que, como parte del análisis, verificarán si existió lectura y suficiente debate parlamentario sobre ese proyecto financiero.