El país cuenta, desde este jueves, con una normativa más extensa, actualizada y clara que regula la industria de la pirotecnia.
Uno de los puntos sensibles de la ley es la protección que se brinda a los niños y niñas, ya que se prohíbe involucrarlos en las actividades de producción, distribución o comercialización de estos productos, sobre todo se prohíbe y castiga a quienes le vendan, regalen o provean algún artefacto que atente contra su integridad.
Para garantizar la protección de los menores frente a los pirotécnicos, los diputados establecieron en la nueva ley tres tipos de faltas: leves, graves y muy graves.
Las últimas (graves) establecen como prohibición el involucrar a niños y niñas en la industria (producción, distribución o comercialización), así mismo prohíbe que se les entregue algún pirotécnico.
De acuerdo con el diputado de Democracia Salvadoreña (DS), Sigifredo Ochoa Pérez, las faltas leves serán sancionadas con un salario mínimo, las faltas graves con cinco salarios mínimos y las muy graves con 10 salarios mínimos.
«Está prohibido tener trabajando niños y tampoco pueden manipular pirotécnicos. Se castiga a quien le entregue pirotécnicos», dijo.
Según Ochoa, la Ley Especial reformó la antigua Unidad de Vigilancia que pertenece al Ministerio de Defensa, en el sentido que se involucra a más instituciones como el Ministerio de Salud, Protección Civil, Bomberos, las alcaldías, PNC, la Corporación de Municipalidades (Comures) y Seguro Social, entre otras.
Se espera que la renovada unidad se coordine de forma efectiva y se ejerzan mayores controles en la industria y en las ventas.
Pero, dijo el diputado, a partir de la nueva ley los ciudadanos podrán informar de fábricas irregulares, ventas no autorizadas o personas que de manera irresponsable entreguen pirotécnicos a niños para iniciarles un proceso legal.
Sobre el tema de los niños quemados, Ochoa explicó que será mucho más fácil identificar a los adultos responsables (sus padres o parientes) ya que corresponderá a las autoridades de salud (de la red pública o del Seguro) dar parte a las autoridades y así comenzar el proceso sancionatorio.
Novedades
Con la nueva ley de pirotecnia se establecen nuevos controles para quienes se dediquen a esta industria. Uno de los cambios se refiere a legalizar los productores.
«Se diferenció entre licencia para operar y permisos para los importadores y comercializadores. Con las licencias esperamos que los fabricantes ilegales se regulen para ejercer más control en sus fábricas y evitar incendios o víctimas», añadió Ochoa.
«Queremos sacar de la ilegalidad a cientos de familias que viven de esto», agregó.
En el caso de los comercializadores (incluyendo a los importadores) no solo se les emitirán nuevos permisos sino que estarán obligados a no atentar contra la producción salvadoreña de pirotécnicos.
Los diputados establecieron que los grandes importadores o comercializadores deben incluir hasta un 30 por ciento de productos salvadoreños, pero además se les ha prohibido que traigan cohetes que ya son producidos acá.
Cifras oficiales señalan que con la nueva ley se controlará a unos 5 mil importadores y comercializadores.
En el caso de las fábricas salvadoreñas dedicadas a este rubro, se estima que hay unas 300 mil personas involucradas sobre las cuales se espera tener más control.
Otras de las novedades en la ley se refiere a sugerir a los productores, importadores o comercializadores que desistan de ofrecer productos que solo detonan o producen mucho humo a cambio de pirotecnia de luces.