Los concejos municipales plurales que se conformarán a partir de 2015 se convertirán en asambleas locales en las cuales las distintas fuerzas políticas discutirán el desarrollo de sus municipios, afirmó el secretario general adjunto de Cambio Democrático, Juan José Martel.
En marzo del próximo año se realizarán elecciones para elegir diputados y alcaldes. En esa ocasión, los concejos municipales se conformarán de manera pluralista.
El partido que gane tendrá derecho al alcalde, el síndico y un número de regidores que le garanticen la mitad más uno. El resto de los regidores será distribuido entre los institutos políticos que participen en la elección de conformidad al número de votos obtenidos.
Los gobiernos municipales plurales −dijo Martel, también director de la Junta de Vigilancia Electoral− representan un avance para la democracia salvadoreña. “Somos de los pocos países de América Latina que no tienen ese sistema”, agregó.
¿Cuál es el mecanismo para la elección de los concejos municipales plurales?
Los partidos políticos van a presentar sus planillas. En caso de no ganar, tendrán que presentar una segunda planilla con los regidores en orden de precedencia. La ley establece el mecanismo para que los partidos que no ganen, según el número de votos que obtengan, puedan tener uno o más regidores.
El Código Electoral establece que al momento de inscribirse una planilla, el partido o coalición designará el orden de precedencia en que sus candidatos a regidores pasarán a integrar el concejo municipal en caso de que su planilla no obtuviere mayoría simple.
El que gana se lleva la mitad más uno, pero el resto de los regidores se distribuye entre los partidos políticos que no ganan en orden proporcional. Entonces, lo que se pretende con esa lista que presentarán los partidos es que se defina la precedencia en la cual ingresarían al concejo municipal en caso que el partido no ganar.
¿Es una segunda planilla?
Legalmente es una planilla, pero en la práctica se hacen dos porque la ley pide un listado aparte en el cual van las precedencias, que incluso podrían ser distintas a la que lleve la primera nómina.
Quien gane la elección en un municipio tendrá el síndico, el alcalde y un número de regidores que le garanticen la mitad más uno.
¿Existe la madurez política para este cambio?
Creo que sí. Uno de los argumentos que dan los que se oponen es que habrá mucha discusión en el seno de los concejos municipales. Puede ser que sea cierto, pero la verdad es que ese argumento en el fondo es que no tengamos madurez impide que avance la democracia. Antes se argumentaba que no había madurez para que el pueblo votara o que es que las mujeres no tienen la suficiente madurez para que voten.
Lógicamente habrá una fase de aprendizaje. No sería raro que se susciten problemas en algunos concejos.
¿Los concejos municipales son un avance democrático?
Sí, es un avance. La idea de fondo es que los concejos municipales deben de ser pequeñas asambleas locales en las cuales entre las distintas fuerzas políticas puedan discutir el desarrollo del municipio.
Somos de los pocos países de América Latina que no cuentan con ese sistema. Los partidos tienen un nivel de representación en los concejos municipales según su fuerza electoral y en todos los lugares se va consolidando y ha dado buenos resultado.
¿Obliga a los partidos políticos a llevar gente más capaz a los concejos?
Efectivamente. Lo que pasa es que como a nivel municipal es más visible la presencia del alcalde, del síndico y del primer regidor, porque son elecciones locales con líderes que tienen cierto peso en sus lugares, y por lo general las elecciones de alcalde son mucho más personalizadas que las de diputados.