El presidente electo de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, aseguró este domingo que se someterá a un chequeo médico para asegurarse de estar en «la mejor condición» de salud al tomar posesión del gobierno el 1 de junio próximo.
«El día de mañana (lunes) salgo del país para chequeos médicos. A partir del primero de junio debo de estar en las mejores condiciones de salud, en las mejores condiciones de descanso, voy a un sistema de chequeos que me hago permanentemente», aseguró Sánchez Cerén en una rueda de prensa.
El mandatario electo, que no precisó en qué país se someterá a su revisión médica, aclaró que «no es que tenga alguna enfermedad grave».
«Son chequeos de rutina, es decir que yo necesito tener la salud para enfrentar los grandes retos en estos cinco años de gobierno», agregó Sánchez Cerén que sustituirá en el cargo al saliente presidente Mauricio Funes, de quien ha sido su vicepresidente desde 2009.
Sánchez Cerén también dijo que antes de asumir el poder se tomará un tiempo de descanso.
El mandatario electo aseguró que para la ceremonia de investidura el 1 de junio se espera la llegada de los presidentes de los países centroamericanos, a los que invitó personalmente en una gira que efectuó por el istmo desde hace poco más de una semana.
Será recibido en audiencia por el Papa Francisco
Mientras, Sánchez Cerén también aseguró que será recibido en una audiencia por el papa Francisco el próximo 25 de abril.
«El día 25 de abril tengo una audiencia concedida por el papa Francisco, voy a viajar a Roma», dijo Sánchez Cerén, quien partirá hacia Italia acompañado de Margarita, su esposa y futura primera dama de la nación.
Electo el 9 de marzo en un balotaje, el entrante presidente asumirá un país polarizado, golpeado por la violencia de las pandillas y una economía en dificultades, que apenas creció 1,9% en 2013.
Sánchez Cerén, de 69 años, será el primer exguerrillero en llegar al poder en este país y el cuarto en América Latina, después del nicaragüense Daniel Ortega, el uruguayo José Mujica y la brasileña Dilma Rousseff.