Es necesario llamar a una Asamblea Nacional para analizar la situación interna y establecer posibles cambios a lo interno (incluso de su dirigencia) de cara a los comicios legislativos de 2015. Así lo afirmaron Roberto Ávila y Gloria Salguero Gross, dos de los fundadores constituyentes del partido tricolor.
«Ayer tuvimos una reunión de fundadores constituyentes antes de la reunión de la comisión política, donde hay dos representantes nuestros. Se definió que se lleve a cabo una asamblea de donde van a emanar los postulados o las decisiones de hacer un foro o congreso para luego someter los resultados de ese ejercicio a la aprobación de otra asamblea, pero todo esto hacerlo de forma inmediata» dijo Ávila.
Para Gloria Salguero Gross la importancia de esta instancia de debate quedó ratificada con los resultados electorales del 9 de marzo porque quienes ganaron fueron todos los salvadoreños en cuanto al resurgimiento de la gente que quiere vivir en paz, tranquilidad y desarrollo que votó por el partido de derecha.
La Asamblea Nacional y el posterior Congreso debe saber escuchar a todos los sectores del partido, y esto es algo que lo deben hacer todos sus dirigentes, hasta el mismo presidente Jorge Velado. «Las bases lo pedían a gritos: queremos la música de Arena, queremos los colores de Arena, y todavía pasamos una semana sin esos colores. Hay que ir a ese Congreso pero escuchar a fondo, no a hacer catársis. Hay que ir a un congreso limpio, no amañado» dijo Salguero.
Los fundadores coincidieron en que Arena es de todos sus partidarios, pero en los últimos años, el denominado G-20, se convirtió en su acreedor principal. La forma de manejar una empresa y un partido político son muy distintas y los grupos económicos que apoyan a Arena no han sabido considerar esta diferencia.
Para Gloria Salguero Gross, el culpable de la segunda derrota electoral consecutiva de su partido tiene nombres y apellidos: el expresidente Francisco Flores, que no supo explicar el destino de los $10 millones de Taiwán. Por eso, hizo un llamado al comité de ética para que lo expulse inmediatamente.