El presidente de la República Mauricio Funes reapareció públicamente en su programa sabatino Conversando con el presidente para decir, entre otras cosas, que dos altos dirigentes de ARENA y un empresario (de los cuales no reveló sus nombres), buscaban sobornar a un abogado para que testificara ante las autoridades y decir que el mandatario iba como acompañante del Ferrari accidentado en el redondel Masferrer.
Asegura que es parte de una campaña del miedo del partido tricolor a la que se le suman los anuncios publicitarios que expresan que El Salvador se convertirá en Venezuela si el FMLN alcanza la presidencia. Para el presidente, el manejo que han hecho los medios de comunicación del accidente automovilístico que protagonizó Eduardo Kriete, ha sido malicioso y fue enfático al decir que él no es propietario de ningún Ferrari, ni ha tenido «el placer» de conocer a Kriete.
Explicó que se fracturó la cadera debido a la artrosis que padece. Según Funes, los médicos que lo tratan no le habían detectado el padecimiento, lo cual la volvió quebradiza y derivó en el accidente ocurrido cuando se disponía a asistir a un acto público.
Dice que las personas que pasaban consulta en el Hospital de Diagnóstico lo vieron llegar en ambulancia y pueden atestiguar que no tiene nada que ver con el accidente, según han insinuado algunos medios de comunicación.
«Yo no tengo ningún Ferrari. ¿Cómo se dio el accidente? no tengo ni idea, me enteré por los medios. Hubo una actitud mezquina de sectores políticos, ciudadanos y medios de comunicación por forma en cómo trataron mi traumatismo de cadera. Hay expresidentes que tienen vehículos parqueados en Miami» afirmó Funes, quien pidió no darle restarle importancia al choque automovilístico.
La cirugía mayor a la que fue sometido duró dos horas y desmintió que ande en silla de ruedas.