El Salvador
viernes 10 de enero de 2025

Adriana Bonilla: Apatía de jóvenes por política se debe a malas prácticas de partidos

por Pedro Salazar


“No solo necesitamos que las presentes y nuevas generaciones voten. También deben aprendan a elegir correctamente a sus gobernantes”, afirmó Adriana Bonilla, candidata a la vicepresidencia por el PSP.

El desencanto de los jóvenes por la política se debe a las malas prácticas de los partidos. La juventud es utilizada solo para actividades de proselitismo, afirmó la candidata a la vicepresidencia de la República por el Partido Salvadoreño Progresista (PSP), Adriana Patricia Bonilla García.

Nacida el 15 de mayo de 1981 en Santa Rosa de Lima, departamento La Unión, Bonilla García se identifica con las mujeres y los jóvenes. “Los jóvenes deben involucrarse en política, no sólo es un derecho sino que también un deber ciudadano. El problema es que para los jóvenes salvadoreños no hay espacios de participación en la toma de decisiones de los partidos políticos”, consideró.

Indicó que la participación de la juventud en los partidos se limita a actividades de campaña y “servilismo, con un alto componente de diferenciación de clases sociales”, ya que “los que mayor capacidad económica tienen son quienes más toman en cuenta”.

A juicio de la vicepresidenciable, de 32 años, “esto no constituye hacer política ni convertirse en líder, más bien es la fórmula ideal solo para crear seguidores con un único fin: pensar como los mayores”.

Adriana Bonilla −quien conoció a sus padres hasta la edad de 5 años porque estos se fueron a Estados Unidos a trabajar cuando ella tenía 3 meses−, subrayó que es importante educar a la juventud, poniendo énfasis en los errores que generaciones pasadas han cometido para que estos no los repitan en el presente ni en el futuro.

Educada con amor, valores y disciplina en los primeros años de su vida por su abuela, agregó que a los jóvenes se les debe inculcar los valores morales y principios que gran parte de “los hijos del conflicto interno mal llamada guerra no recibieron”, situación que ha provocado un caos social que genera inseguridad, delincuencia, corrupción de servidores públicos y deshumanización de los temas sociales que más nos afectan a todos los salvadoreños.

Muchos jóvenes buscan participar en política dentro de un partido, pero pronto se dan cuenta que los espacios son mínimos porque la práctica generalizada es el clientelismo y padrinazgo desmesurado, señaló la candidata, quien se declara católica practicante que asiste frecuentemente a misa.

¿Se confiesa y comulga? A esta interrogante, Adriana Bonilla respondió que “sí” y admitió entre risas que algunas veces la confesión dura horas.

Vivió su niñez y adolescencia en Usulután y estudió en una escuela de niñas. Ahí participó en elecciones estudiantiles como candidata para el gobierno estudiantil. “Cuando estaba en séptimo grado, hicimos la dinámica de la campaña y gané la presidencia”, recordó.

Bonilla enfatizó que parte de los recuerdos de su niñez en ese departamento es una trinchera de soldados que estaba de manera permanente en la esquina de su casa. También a la par había una cancha y ahí aterrizaban los helicópteros con soldados heridos. Algunas veces veía cuando venían los soldados muertos.

“Eso marca a cualquiera. Sin embargo, yo me sentía protegida porque los soldados que estaban en la esquina de mi casa nos iban a defender. Y desde ahí comencé a admirar a los militares. Realmente para mí son héroes que defendieron a nuestra patria hasta con su vida”, dijo.

Esto quizás explique el hecho que Adriana Bonilla sea la compañera de fórmula del teniente coronel René Rodríguez Hurtado, aspirante a la silla presidencial por el PSP.

Pocos amores y muchos novios

Después de traer a la memoria estos recuerdos, la candidata a la vicepresidenta confesó que durante su adolescencia la “perseguían muchos chicos” y que su primer beso lo dio a los 15 años.

Sin embargo, la sonrisa se convirtió en carcajada y nerviosismo cuando se le preguntó cuántos novios ha tenido. Luego de sostener que esta ha sido la pregunta más difícil que le han formulado y tratar de evadir la interrogante, Adriana Bonilla dijo: “Amores realmente han sido pocos, pero novios bastantes”.

Podría ser que parte de los nervios y la risa de la vicepresidenciable era que el novio estaba a la par de ella durante la entrevista, además del padre que también observaba.

En lo que sí no vaciló en hablar la ahora política fue sobre el machismo. Aseguró que algunas mujeres tienen la culpa del marcado machismo que hay en el país. “El machismo es algo cultural, de nuestros antepasados”.

“A veces ni los mismos hombres tienen la culpa de ser machistas. Es algo que se ha venido dando de generación en generación. Por ejemplo, muchas madres les dicen a los niños que ellos son hombres y que no deben lavar un plato, que están para que se les cocine. Incluso ponen a sus hermanitas a que les sirvan a los varones”, señaló.

Muchas mujeres salvadoreñas han sido educadas con estos patrones culturales. No obstante, “esto está cambiando y las mujeres nos estamos empoderando, creo que estamos ocupando un papel más protagónico en la sociedad”.

“Estoy en un partido de militares. Cualquiera podría pensar que los militares son machistas. Pero ellos me han abierto el espacio desde el primer día y toman en cuenta mis opiniones y propuestas”, agregó la candidata a la vicepresidenta.

Recordó que la mayoría de la población son mujeres. “En nuestra manos está decidir quién será el gobernante en los próximos cinco años.

“No solo necesitamos que las presentes y nuevas generaciones voten. También deben aprender a elegir correctamente a sus gobernantes, que hagan consciencia que su decisión electoral no solo les afecta a ellos, sino al prójimo, a su familia, al país”, consideró