El porcentaje de salvadoreños que consideran que la democracia es preferible a otra forma de gobierno se mantiene sin mejoras entre los años 199 y 2013, revela un estudio de Latinobarómetro, una corporación que investiga el desarrollo de la democracia, la economía y la sociedad en su conjunto.
Según el informe de 2013, los países centroamericanos no logran aumentar el apoyo a la democracia. Costa Rica, es el país que más apoyo a la democracia había perdido en el período 1995- 2013, pero se encuentran en la misma situación de Panamá, Honduras, Nicaragua y El Salvador.
En promedio, solo el 49% de la población centroamericana piensa que la democracia es la mejor forma de gobierno, un 17% prefiere un gobierno autoritario y a un 24% le es indiferente.
En 1995, cuando se realizó el primer estudio Latinobarómetro, la preferencia por un gobierno democrático era en promedio del 60%.
En Panamá, un país que ha crecido de manera excepcional, la democracia pierde 26 puntos porcentuales entre 1995 (75%) y 2013 (49%) encontrándose actualmente 6 puntos por debajo del promedio del período. Una nueva comprobación de que el crecimiento económico no tiene relación con el desarrollo de la democracia, de acuerdo con el referido estudio.
Honduras, un país donde no hay grandes acontecimientos ni caídas drásticas como en Panamá, se pierde (3 puntos) apoyo a la democracia tanto en el promedio del período 1995 -2013, como respecto del punto de inicio en 1995 (2 puntos). Curiosamente después del golpe del 2009 aumenta el apoyo a la democracia a 54% en ese año, pasando a 53% en 2010 para después volver a bajar a 43% en 2011.
Nicaragua, un país cooptado por una familia que se toma el poder, baja sólo 3 puntos en apoyo a la democracia respecto del promedio del período 1995- 2013, y nueve puntos respecto de 1995, alcanzando 50% en 2013, bastante por debajo del promedio de la región para este año, que alcanza 56%.
Latinobarómetro asegura que El Salvador está en una situación menos negativa, casi (un punto de diferencia) en su promedio histórico, pero sin mejorar el apoyo a la democracia respecto de su punto inicial en 1995.
El Salvador perdió siete puntos de apoyo al sistema democrático de 1996 a 2013, ubicándose en un 49%.
El estudio indica que la década de América Latina anunciada en 2010 se confirma con los datos 2013. América Latina vive un momento disminución de la pobreza, aumento de la educación, aumento del crecimiento económico, que ha proporcionado el mayor nivel de satisfacción de vida desde 1995, agrega.
La precariedad, la pobreza, la desigualdad, la discriminación, siguen siendo, sin embargo, el Talón de Aquiles de la región, que de alguna manera le impide pasar al siguiente escalón. La democracia se ve retenida por la desigualdad en el acceso a bienes políticos y también bienes económicos, enfatiza.
En total un 68% de la región se ubica en la clase baja, un 30% en la clase media que va en aumento y un 2% en la clase alta. Ese 68% de clase baja tiene la mitad de sus integrantes en situación precaria, a algunos no les alcanza para comprar alimento, detalla.
Para Latinobarómetro, “tenemos con ello dos américas latinas, la que disfruta de los beneficios del crecimiento y la que mira como disfrutan los otros. Veremos más y más las protestas como manifestación de una ciudadanía consciente de las deficiencias del sistema económico, político y social. Hay demanda por más democracia”.