En menos de cuatro días, el presidente de la República, Mauricio Funes, parece estar empeñado en cercar moralmente al exgobernante Francisco Flores con el destino de una donación hecha al país por la República China-Taiwán.
El gobernante dijo, en un inicio, el sábado anterior que las autoridades nacionales deberían investigar el destino de unos $10 millones que representaron una donación de Taiwán.
Con algún tono de sorna agregó, en ese momento, que aconsejaba al candidato presidencial de ARENA, Norman Quijano, que alejara a Flores de su papel de principal asesor de su campaña presidencial.
Ante eso, Flores dijo el lunes pasado que el gobernante Funes se muestra inestable porque un día habla de dólares y después de euros. Con ese tipo de posición trató de desestabilizar las versiones de Funes respecto al manejo de una donación de Taiwán.
Incluso, dijo que él (Flores) no le daba importancia a las manifestaciones de mandatario Funes alegando su supuesta inestabilidad y locura con la que «cada mañana nace«.
Dura respuesta
Ante la respuesta de Francisco Flores, Funes no se quedó callado. Al salir de un acto de presentación del Informe de Desarrollo Humano de Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) fue rodeado por los periodistas y aprovechó para responderle a Flores.
“Él va a tomar importancia -dijo- cuando se inicie un proceso penal en su contra que es lo que espera que la Fiscalía General de la República haga, en la medida que avancen las investigaciones”.
Este párrafo vaticina que Funes está convencido de que el expresidente Francisco Flores tendrá que encarar un proceso penal.
Después soltó un adelanto de los hechos que podrían provocar esa causa penal: Funes alegó que recibió información en el sentido de que el gobierno de China en Taiwán donó unos $10 millones al país, cuando casi acababa el mandato de Flores.
Eran tiempos, según él, en que arrancaba la campaña electoral. Dijo que, ante eso, investigó porque supuestamente esa donación venía para el Instituto de Libertad y Progreso, una oficina que depende de la Presidencia de la República.
Funes explicó que, cuando se habría producido la donación, esa oficina estaba adscrita al Ministerio de Justicia porque siempre se ha dedicado a titular bienes inmuebles de personas de escasos recursos.
El gobernante aseguró que, ante eso, solicitó una información al director del Instituto Libertad y Progreso y que le informaron que, desde el año 2000 hasta la fecha de la cooperación, ese instituto no ha recibido cooperación taiwanesa.
Funes recordó que Taiwán le dio solamente $900 mil para enfrentar el tema del deslave en Las Colinas, en Santa Tecla.
“De esos $10 millones, no aparece nada”, dijo tras advertir que “de ahí la duda razonable que yo he planteado es: ¿a dónde están?”.
Refuerza ataque
Funes fue duro en su respuesta a Flores. “Si a eso él le llama locura, locura me parece a mí haberse metido en el bolsillo o haber desviado fondos que venían de parte de la cooperación taiwanesa”, dijo.
Y luego mencionó que “locura me parece defraudar los intereses de los salvadoreños apropiándose de recursos de forma indebida. Locura me parece no darle importancia a una investigación de carácter penal, sobre ese hecho que en lenguaje jurídico penal de nuestro país se conoce como ‘malversación de fondos’”.
Una vez que hizo esa advertencia, dijo que él no está acusando a nadie de malversación de fondos.
“Estoy diciendo- agregó- que la Fiscalía debe de investigar a dónde fue a para esa ayuda, porque puede ser que el mismo gobierno del expresidente Flores hayan ido a parar, en lugar de dárselo al instituto, a otro ministerio a otra institución o, incluso a su partido político, porque en esa época estaba el ambiente electoral del 2004”.
Funes acabó diciendo que si a eso Flores le llama locura, “me parece falta de respeto, no solo a mi persona, me parece una falta de respeto a un proceso de investigación sobre un hecho claro. Yo no estoy hablando de cualquier cantidad de dinero. Estoy hablando de $10 millones”.
Respuesta de Taiwán
Diario 1 intentó hoy pedir una entrevista al embajador de Taiwán en El Salvador, Andrea Sing Ying Lee, pero tuvo éxito.
La encargada de prensa de esa sede diplomática respondió que pidiéramos la entrevista mediante un correo electrónico.
Así se hizo. Sin embargo, dieron pocas posibilidades de que la respuesta de esa sede diplomártica se tuviese hoy. También trascendió que periodistas de canal 21 de televisión acudieron a la sede de la embajada de la República China en Taiwán, pero no los dejaron ingresar a ese sede ni obtener una respuesta sobre la acusación hecha por Funes.