El Salvador
viernes 15 de noviembre de 2024

Pandilleros suben temperatura política

por Redacción

A sabiendas de que ellos, y sus familiares, representan unos 300 mil votantes, las pandillas asumieron, ésta semana, un doble y desafiante papel.

El primero frente a todos los candidatos presidenciales. El segundo frente al Ministro de Seguridad, Ricardo Perdomo.

Con una masiva movilización decretada el fin de semana, y  la circulación de un comunicado en el que asumen una clara posición política, los pandilleros enviaron tantas señales juntas, el fin de semana, como nunca antes.

Lo más significativo de lo sucedido el fin de semana es que las pandillas les dicen, por primera vez, a los candidatos presidenciales, que son una fuerza política importante que deben tomar en cuenta.

Los cálculos oficiales revelan que en el país hay, al menos, 60 mil pandilleros. Si eso es así y establecemos que, por cada pandillero se registran cinco familiares, entonces se podría establecer que ese círculo social representa unos 300 mil votantes.

Pero, en un comunicado dicen algo más: reconocen que, en anteriores elecciones presidenciales, se abstuvieron de votar.

Incluso, confiesan que, en otras ocasiones,  ordenaron boicotear los comicios.

Pero, al afirmar que, en las próximos elecciones, sí votarán, se interpreta que le lanzan, a los candidatos presidenciales, que quienes se acerquen más a sus tesis, colectarían sus votos.

El candidato que quiere sus votos tendría que pasar, según se interpreta, que debe apoyar la tregua y tender un puente hacia sus posiciones.

Para unos esos podría significar un chantaje. Para otros son posiciones pragmáticas.

Pero, si se agudiza la interpretación, podríamos advertir que el candidato presidencial que estaría más lejos de los votos de los pandilleros, y sus familiares, sería Norman Quijano de ARENA.

Sobre todo porque ha dicho, en su publicidad política, que él no pacta con delincuentes.

Pero, lo más relevante de todo es que las pandillas se proclamaron, el fin de semana, como un arsenal político que los candidatos presidenciales deben cautivar, si quieren unos 300 mil votos.

Frente al Ministro

Pero, las movilizaciones de pandilleros en autobuses, desde diversos puntos del país, pudieron significar otra cosa: un verdadero desafío ante el Ministro de Seguridad, Ricardo Perdomo.

Perdomo ha dicho que quiere la tregua pero sin excesos, ni beneficios que no merecen los reclusos.

El Ministro de Seguridad decidió, incluso, eliminar los contactos de los pandilleros con periodistas.

Con las movilizaciones de pandilleros en autobuses pretendían, según supo el gobierno, protestar y reclamar más apoyos para la tregua.

Por eso es que las autoridades registraron los autobuses y pretendieron incomodar a los pandilleros y los familiares que viajaban en los vehículos.

Pero, esa protesta ante Perdomo, por su incompleto apoyo a la tregua, como lo dicen, podría estar conectadada con una nueva guerra que se estaría dando entre Perdomo y el Ministro de Defensa, David Munguía Payés.

Munguía es uno de los preculsores de la tregua junto al Obispo Fabio Colindres y  Raúl Mijango.

Pero, la solicitud de apoyo de los pandilleros a la tregua estuvo precedida por unas manfestaciones de Munguía a los periodistas.

El Ministro de Defensa calificó de “baby cártel” al grupo contra el que Perdomo se ha liado, en las últimas semanas, como fuerza antinarcóticos.

Perdomo ha ordenado una serie de capturas contra miembros del Cartel de Texis.

Con eso lo que hizo Munguía fue minimizar y reducir los esfuerzos de Perdomo en la lucha contra el narcotráfico internacional.

Pero, sumado el ataque de Munguía y las movilizaciones de pandilleros, es previsible establecer que los mareros quieren decirle al país que los reconozcan como una fuerza social importante.