El Tribunal Quinto Contra el Crimen de San Salvador halló culpable del delito de homicidio agravado a Noé Gustavo Reynosa González por el asesinato de una madre y su hija como parte del accionar criminal de la pandilla 18 Revolucionarios en el distrito de Apopa, en San Salvador Oeste.
Las víctimas eran Guadalupe Bonilla de Flores y Stephani S. B., asesinadas el 6 de marzo de 2013, según información oficial de Centros Judiciales de El Salvador.
De acuerdo con los hechos acreditados por el tribunal, el imputado de alias “Frijol” recibió una orden de otro pandillero, la pareja sentimental de la madre, quien se encontraba recluido en un centro penal del país. El autor intelectual del crimen envió una “wila” —un mensaje escrito por pandilleros presos a sus clicas— con el mandato de asesinarla por no visitarlo en la cárcel.
Para cometer el crimen, el pandillero y otros sujetos sacaron a las víctimas de su hogar con el engaño de entregarles dinero. Luego, las condujeron a un predio baldío donde fueron violadas por todos los involucrados antes de ser estranguladas. Después, trasladaron sus cuerpos a una zona del cantón Tres Ceibas, donde fueron enterradas.
El tribunal dio crédito a la investigación sobre el crimen e impuso una condena de diez años de cárcel contra Reynosa González por el delito cometido.