Mediante un comunicado la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) compartió el informe de la investigación realizada en conjunto con el Gobierno de los Estados Unidos (EE.UU.) sobre el “accidente ocurrido el 8 de septiembre de 2024, en el que un helicóptero UH-1H de la Fuerza Armada Salvadoreña se estrelló, causando la muerte del director de la Policía Nacional Civil (PNC), Comisionado General Mauricio Arriaza Chicas.
En ese accidente también fallecieron: el comisionado de la PNC, Douglas Omar García Funes, conocido como “Carabinero”; el subdirector de Investigaciones de la PNC, Rómulo Pompilio Torres, un miembro de la Unidad Táctica Especializada Policial «Jaguares», cabo Abel Antonio Arévalo; y el periodista David Cruz, de Canal 10. También tres miembros de la FAES: Gerson Ricardo Batres, Alexis Alberto Quijano López y Jonathan Alexander Raymundo Morán.
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Así mismo, en ese accidente falleció el civil, Manuel Coto Barrientos, exgerente general de COSAVI quien se encontraba bajo custodia del Estado al ser acusado de los delitos de defraudación a la economía y lavado de activos.
La investigación fue ordenada por el presidente de la República, Nayib Bukele, tras conocer sobre el accidente y esta contó con el apoyo de expertos enviados por el Gobierno de los EE.UU.
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“Expertos en aviación de El Salvador y de los EE.UU. concluyeron de manera unánime, que el accidente fue el resultado de una combinación de problemas operativos durante la noche del incidente. Entre los factores identificados destacan las malas condiciones climáticas, la lluvia y la nula visibilidad, culminando en el impacto de la aeronave contra una colina en Pasaquina, La Unión, resultando en el fallecimiento de todos los tripulantes”, indicó el comunicado.
El informe señala también, que ante esta situación, el Presidente Bukele ha ordenado una revisión exhaustiva de los procedimientos de la aviación militar y los protocoles operativos y de vuelo, con el objetivo de implementar mejoras que garanticen una mayor seguridad en la aviación militar salvadoreña.
