Permanecerá en prisión un egresado de medicina que durante once años consecutivos ejerció la profesión de doctor y brindó incapacidades laborales a sus pacientes sin contar con el título universitario, por orden del Juzgado Segundo de Paz de San Martín, en San Salvador.
El acusado es Francisco Ernesto Artiga Pérez, señalado por los delitos de ejercicio ilegal de la profesión y falsedad material, ambos en modalidad continuada, ya que ejerció el oficio sin titularse y brindó servicios de salud sin autorización.
Según una investigación realizada por la Fiscalía General de la República (FGR), el imputado abrió una clínica privada en Altavista 8ª etapa en el distrito de San Martín en 2005, donde ofrecía consultas como médico general, sellaba recetas y emitía incapacidades médicas que carecían de validez, ya que las registró solo con el número provisional que otorga la Junta de Vigilancia de la Profesión Médica a los egresados.
Sus acciones se develaron en octubre del 2022, cuando emitió una constancia médica de incapacidad a un paciente quien, como es de costumbre, entregó el documento al área de Recursos Humanos de la empresa donde labora. El personal de la institución solicitó una investigación para confirmar el número de autorización del médico, que resultó en el hallazgo de la negligencia.
El ministerio público descubrió que Artiga Pérez emitió una serie de incapacidades que causaron un perjuicio económico al Instituto Salvadoreño del Seguro Social por las incapacidades pagadas a cotizantes del sistema.
El imputado fue detenido por la Policía Nacional Civil (PNC) el pasado 18 de julio. En tanto, la cínica fue cerrada al público por orden del Consejo Superior de Salud Pública. La audiencia inicial del caso resultó en la detención provisional del acusado, a medida continúan las investigaciones en la etapa de instrucción, y guardará prisión en el Centro Penitenciario La Esperanza.