El Salvador
domingo 24 de noviembre de 2024

El misterioso caso de un migueleño que lleva más de un mes desaparecido

por Redacción


En la última llamada que recibió su familia, Miguel Ángel les comentó que se encontraba mal de salud, con dolores estomacales, cansancio y dolor en la garganta. Días antes de su desaparición habían capturado a uno de sus cinco hijos.

Miguel Ángel Chávez, de 55 años, se encuentra desaparecido desde el pasado 27 de abril. Él junto a su esposa salieron ese día de San Jorge, municipio de San Miguel, en horas de la mañana. Ese fue el último día en el que su familia lo vio.

La pareja bajó en la terminal de buses de Oriente en San Salvador. Ella se dirigió a Apopa a visitar a una hermana y él tomó otro bus en la terminal de Occidente, con destino a Santa Ana.

Miguel Ángel viajaba todas las semanas a Santa Ana, ya que él se encontraba trabajando desde diciembre pasado para una tienda de alimentos llamada “Conchita”.

La familia desconoce el lugar exacto en donde trabajaba Miguel Ángel, tampoco saben puntualmente cuáles eran las funciones que desempeñaba en la tienda, pero al parecer era repartidor de productos de alimentos, según la hermana del desaparecido, Rosa Chávez García.

De acuerdo a las declaraciones que brindó Rosa a Diario 1, Miguel Ángel le comentó a su esposa en la terminal de Oriente que se sentía muy cansado, a tal punto que se desplomó en el suelo.  Sin embargo, decidió continuar con su viaja al Occidente del país.

“También se sentía mal porque le agarraron preso a un hijo”, aseguró Rosa, ya que según la hermana de Miguel Ángel, a mediados de abril, el joven fue detenido erróneamente porque se encontraba junto a otro muchacho quien es pandillero de la zona.

A eso de las 4:00 de la tarde Miguel Ángel llamó a su esposa para avisarle que ya había llegado a su trabajo, pero que aún se sentía con mucho malestar estomacal, le dolía su cuerpo y se sentía muy cansado. En la llamada dijo que no podía hablar mucho porque le dolía el pecho y la garganta.

Y eso fue lo último que supieron de Miguel Ángel. Nunca más volvió a contestar el teléfono, ni se comunicó por ningún medio con sus familiares, quienes han ido en varias ocasiones a Santa Ana a buscarlo y a realizar la denuncia de su desaparición a las autoridades.