El director de la organización humanitaria Instituto Salvadoreño del Migrante (INSAMI), César Ríos, dijo este sábado que espera que el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, aborde «urgentemente» el tema migratorio.
Ríos manifestó a la prensa que «confiamos» en que Biden retome las promesas que «quedaron pendientes» desde la Administración de Barack Obama.
Añadió que espera la «reunificación de niños y familias separados» durante el Gobierno de Donald Trump y que se busque la residencia permanente para los beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS) y de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).
Ríos, que felicitó «al pueblo norteamericano por su muestra democrática al elegir a su nuevo presidente», también abogó por un «gesto humano a migrantes en tránsito».
Anualmente, miles de salvadoreños y centroamericanos intentan llegar a Estados Unidos tratando de escapar de la violencia y pobreza que afecta a sus países, según expertos en migración.
El candidato demócrata Joe Biden se convirtió en el presidente electo de EE.UU. después de haber conquistado el estado clave de Pensilvania, indicaron las proyecciones de las cadenas CNN, CBS y NBC.
Biden ha criticado en numerosas ocasiones la política de Trump que llevó a la separación de familias inmigrantes.
También prometió que de ganar las elecciones promoverá una iniciativa para conceder la ciudadanía a los 11 millones de indocumentados que se calcula viven en el país, en su mayoría latinos.
En una entrevista con Efe, la vicepresidenta electa, Kamala Harris, también ofreció el mes pasado revertir la política migratoria de Trump, incluyendo «Remain in Mexico».
Se estima que unos tres millones de salvadoreños viven en Estados Unidos, de donde proviene casi la totalidad de las remesas de dinero que recibe el país centroamericano y que sostienen su economía.
Datos de la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM) de 2019 y publicada en 2020 por el Ministerio de Economía indican que 1,63 millones de salvadoreños son beneficiados con las remesas y representan el 24,3 % de la población.
Un total de 471.633 hogares reciben estas divisas, de los que 13.530 se encuentran en pobreza extrema y 68.874 en pobreza relativa.