Las autoridades de la capital de El Salvador instalaron desde este miércoles en una zona baldía un autocine como alternativa de entretenimiento para los salvadoreños ante la pandemia del COVID-19, que no da tregua en el país centroamericano.
La actividad forma parte de los pocas iniciativas que la alcaldía de la capital logró impulsar en el marco de las fiestas patronales en honor al Divino Salvador del Mundo, cuya fecha principal es este 5 de agosto.
Las autoridades, que proyectarán películas durante siete noches consecutivas, han establecido un límite de 100 vehículos con un máximo de cuatro ocupantes.
«Estamos conscientes de los momentos difíciles que se viven en el país. Es necesario realizar actividades como esta y promover así el bienestar entre las familias», señaló el alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt.
Por orden del Gobierno, todos los centros de entretenimiento, como cines y teatros, se encuentran cerrados y su reactivación forma parte de las últimas etapas de un plan de desescalada que se ha estancado por el incremento de los contagios.
La pandemia del COVID-19, cuya curva de contagios se encuentra «prácticamente incontrolable», según el presidente Nayib Bukele, no permitió que se instalaran los característicos juegos mecánicos y ferias de estas fechas.
Las actividades religiosas, que cada año reúnen a miles de salvadoreños en las calles del Centro Histórico de San Salvador, también fueron suspendidas casi en su totalidad.
Como alternativa, los jerarcas católicos optaron por trasmitir en sus propios medios de comunicación y en las redes sociales la grabación de la tradicional procesión de la transfiguración de Jesús, llamada popularmente como «La bajada», realizada en 2019.
El país centroamericano rompió nuevamente su récord de contagios diarios con 439 casos confirmados con las pruebas procesadas el martes. Esta cifra elevó a 18.701 el total de contagios oficiales, de los que 509 se encuentran en estado crítico y 498 fallecieron.
No obstante, publicaciones de medios locales señalan que las inhumaciones de casos confirmados y sospechosos de COVID-19 llegaron a los 2.272 el 8 de julio pasado.
San Salvador es el epicentro del COVID-19 en El Salvador con 2.415 casos confirmados, lo que representa aproximadamente el 13 % del total de contagios.
Las festividades del Divino Salvador del Mundo son las más importantes y de las que más turismo generan en El Salvador, donde la actividad gubernamental se paraliza entre el 1 y el 6 de agosto, mientras que el sector privado lo hace los días 3, 5 y 6 del mes.
El Ministerio de Turismo salvadoreño prevé que al cierre del año 2020 el golpe de la pandemia de COVID-19 a este sector represente un pérdida de 1.145 millones de dólares en divisas, mientras la cifra de visitantes caerá en 1,8 millones de turistas.