El Salvador vive tiempos complicados. La crisis generada por la pandemia del Covid-19 ha impactado la situación del diario vivir de todos los salvadoreños y ha generado una serie de preocupaciones.
Ha transcurrido poco más de un año desde que Nayib Bukele asumió la presidencia de la República y el 55% de los salvadoreños encuestados por Diario 1 arrojaron que la corrupción es una de las grandes preocupaciones. También la falta de empleo (28%), la falta de transparencia (14%) y el mal servicio de salud pública (6%).
En el tema económico, los salvadoreños encuestados señalaron que no han visto planes concretos para reactivar la economía del país, la cual fue impactada por el advenimiento de la pandemia del Covid-19 a mediados del pasado mes de marzo.
El 22 de marzo, el presidente Bukele decretó cuarentena domiciliar obligatoria y ordenó el cierre de fábricas, restaurantes, lugares turísticos y centros comerciales. Sin embargo, más allá del encierro total y la parálisis económica, Bukele no ha presentado planes concretos para reactivar la economía.
El Ministerio de Economía ha señalado que producto de la pandemia se perderán un aproximado de 600 mil empleos. Cifras del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) de finales de febrero pasado daban cuenta de 875,368 empleos activos, por lo que el cese de 60 mil fuentes de trabajo formal significaría una caída del 6,85 %.
Además, la economía de El Salvador tendrá la peor caída de toda Centroamérica al cierre de 2020. El último informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), publicado la semana pasada, dice que El Salvador tendrá una caída del -8.6% de su Producto Interno Bruto (PIB).
En el tema de seguridad, los salvadoreños encuestados no evaluaron mal al gobierno. Solo el 3% dijo que la falta de seguridad era uno de los principales problemas.
Sin embargo, pese a la reducción de homicidios, las pandillas siguen operando y continúan siendo una fuerza importante en las colonias y cantones del país. Una muestra de su poderío fue el súbito incremento de homicidios a finales del pasado mes de abril. Hubo más de 80 asesinatos en cuatro días.
El mal servicio de salud pública también es uno de los problemas que los salvadoreños señalaron en la encuesta. La pandemia del coronavirus reveló el frágil sistema sanitario del país. Los hospitales han colapsado y, según el Colegio Médico, más de 30 doctores han fallecido combatiendo el Covid-19.
El 14% de los encuestados opinó que la falta de transparencia en el uso de los fondos públicos es uno de los principales problemas. De hecho, la Corte de Cuentas ha detallado en sus informes que el gobierno ha retrasado información sobre la ejecución de obras y proyectos en el marco de la pandemia del coronavirus.
La corrupción
El 55% de los salvadoreños, de acuerdo con la encuesta realizada por Diario 1, indicó que los actos de corrupción es una de las grandes preocupaciones del momento. Investigaciones periodísticas publicadas en los últimos dos meses revelan una serie de presuntos actos de corrupción en el gobierno de Nayib Bukele.
A mediados del pasado mes de junio salieron a la luz pública presuntos actos de corrupción de funcionarios que se habrían aprovechado de la emergencia decretada por la pandemia del Covid-19 para cometer actos ilegales.
Se trata de adjudicaciones de contratos por parte del gobierno al menos a un funcionario y a familiares y otras personas cercanas a servidores públicos.
El pasado 20 de junio, el presidente NayibBukele destituyó al presidente del Fondo Ambiental de El Salvador (FONAES), Jorge Aguilar, conocido como Koky Aguilar, por presunta corrupción.
La decisión de Bukele surgió luego que medios de comunicación vincularan al entonces presidente de FONAES como el dueño de una empresa que vendió protectores faciales al gobierno por 250 mil dólares.
Antes de ser funcionario, Koky Aguilar era conocido como empresario del sector reciclaje. INSEMA fue la empresa encargada de recibir el material plástico recolectado en la campaña “Reto Recicla” por medio de la cual el Gobierno recolectó 4.5 millones de botellas plásticas.
Según la investigación de Salud con Lupa, este plástico recolectado sirvió para la elaboración de las caretas protectoras que posteriormente adquirió el gobierno.
Los protectores faciales fueron vendidos al gobierno a un precio unitario de $2.50, según consta en la orden de compra del sitio COMPRASAL, con fecha 15 de abril.
Pocos días después, El Diario de Hoy reveló que dos empleados del viceministro de Ingresos fundaron en octubre de 2019 una empresa que recientemente vendió al gobierno $750 mil en protectores faciales.
Los empleados del viceministro son Rogelio Cabrera y Jorge Alberto Vásquez, quienes fundaron hace siete meses una empresa que le vendió al gobierno, el pasado 25 de abril, protectores faciales por 750 mil dólares.
El problema fue que estos dos hombres son empleados, en otra empresa, del viceministro de Ingresos del Ministerio de Hacienda, José Alejandro Zelaya Villalobo, quien a la fecha no ha dado respuestas sobre esos cuestionamientos.
Luego han aparecido nuevos casos de presunta corrupción y nepotismo que han manchado la buena imagen con la que el presidente Nayib Bukele inició su mandato.
La metodología de la encuesta
La encuesta de Diario 1 fue realizada con una muestra técnicamente significativa, cumpliendo todos los estándares y metodologías internacionales. Ha sido validada porel Instituto Americano de Educación Superior y,para propósitos de transparencia en el manejo de los datos, la tabulación y la generación de los resultados ha sido supervisada y certificada por Fundación transparencia.