El ministro de Defensa, Francis Merino Monroy, aseguró este martes que dentro de la Fuerza Armada (FAES) han fallecido cuatro personas por COVID-19 mientras que el resto de personal aún contagiado es, en su mayoría, asintomático o son sintomatología leve.
Además, dijo que un soldado está en condición crítica y requiere de asistencia con ventilación mécanica.
«De personal de alta han fallecido cuatro, los hemos anunciado en las fechas que fallecieron, y el resto de personal nuestro que se ha logrado recuperar. Está dentro de lo que habíamos calculado, incluso más bajo de lo que nuestro epidemiólogo nos había dicho», afirmó en la entrevista matutina de Radio 102nueve.
Asimismo, destacó que el total de contagiados es una estadística que maneja el Ministerio de Salud (MINSAL), pero que, de momento, «tenemos nada más un elemento en estado crítico, o sea que está con ventilación mecánica, y el resto con síntomas leves y personal asintomático». Sin embargo, no dijo cuál es el total de personal contagiado.
Por otro lado, Merino Monroy descartó que haya una unidad en específico que registre la mayor cantidad de contagios dentro de la institución armada: «El primero (soldado) que falleció contrajo el virus cuando salió con licencia, no en operaciones. Hay mucha exposición en las calles, pero no hay una unidad en específico que haya tenido más contagiados».
Agregó que «ha sido variado, del personal que falleció, ninguno estaba en la calle, sino que cumplía funciones de apoyo tanto el Plan Control Territorial, como en la lucha contra el coronavirus, pero no era que se veían en la calle».
Soldados en Mali
El ministro de Defensa también habló de los contagios en las filas salvadoreñas que cumplen tareas en el exterior. Entre ellos, hay contagiados en misiones en la República de Mali (África Occidental) y Líbano (Asia).
«El caso más emblemático fue en Mali, donde falleció un teniente coronel en aquel país; en ese lugar el reporte que tengo del comandante es que últimamente había 10 infectados, siete de ellos asintomáticos y tres de ellos con síntomas leves», reveló el ministro.
Mientras que en el contingente desplegado en Líbano, afirmó que «teníamos un sargento contagiado, pero estaba en la base en España; le dieron el tratamiento y está sano, ya fue llevado a Líbano. Ninguno de ellos (infectados) está crítico y en el hospital de Naciones Unidas se les da tratamiento».
Finalmente, Merino Monroy destacó la labor que realizan en el Hospital Militar, destinado inicialmente a pacientes COVID-19 dentro de sus filas, pero que ahora también atiende a civiles.
Al respecto, dijo que más de 60 personas se han beneficiado con transfusión de plasma convaleciente en ese recito militar, muchos de ellos son civiles; además, hay dos zonas separadas en las unidades de cuidados intensivos, una para infectados con COVID-19 y otra para atender otras enfermedades.
Además, aseguró que «en el Hospital Militar, personal sanitario no ha fallecido nadie, sí ha habido médicos que se han contagiado pero ya salieron de la situación en que se encontraban. Han sido tratados en el Hospital Militar».
Hasta el 1 de junio, la Fuerza Armada confirmó la recuperación de 50 militares, lo que elevó la cantidad de soldados que superaron la enfermedad, en ese entonces, a 241 elementos, según confirmó en esa fecha el ministro Merino Monroy.
Al menos otros 20 militares seguían enfermos y con síntomas. Y de esos, dos estaban en unidades de cuidados intensivos, aunque este martes el ministro dijo que solo un soldado está grave.
El personal policial y militar es del denominado de primera línea, porque tiene un trabajo de campo que los arriesga a contraer la enfermedad y, junto al personal médico y de enfermería, son los más expuestos a contagiarse de COVID-19.
Por otro lado, el país está en la etapa de mayor contagio, con dos días consecutivos reportando más de 300 infectados con el virus SARS-CoV-2, más de 10,000 casos desde que inició la epidemia en el territorio nacional y casi 280 muertos.