El Ministerio de Seguridad ordenó a la Policía Nacional Civil (PNC) instalar unos 800 retenes vehiculares en los que permanecen más de 8 mil agentes tanto de seguridad pública como de tránsito encargados de vigilar que los ciudadanos cumplan la cuarentena domiciliaria que, según el Gobierno de Nayib Bukele, terminará el 15 de junio.
Los policías están en las entradas y las salidas de los departamentos y los municipios en todo el país, según Rogelio Rivas, ministro de Seguridad.
En unas breves declaraciones que pronunció esta mañana, el funcionario aseguró que los hospitales de la red pública ya están colapsados, por tanto, es urgente evitar que más personas puedan contagiarse de coronavirus.
Recordó, además, que este tipo de vigilancia ya estaba siendo implementada antes de las emergencias que provocaron las depresiones tropicales Amanda y Cristóbal.
Aseguró también que otro grupo de policías está trabajando con supervisores del Ministerio de Trabajo y Previsión Social (MINTRAB) para evitar que las empresas que no están autorizadas pretendan reiniciar operaciones.
Todas estas acciones, según él, tienen como base el decreto ejecutivo número 29 que el Gobierno de Bukele divulgó el 3 de junio.
Ese decreto extiende el cuarentena domiciliar obligatoria hasta el 15 de junio y mantiene todas las restricciones que los anteriores decretos ejecutivos ignorando la ley de emergencia aprobada por la Asamblea Legislativa.
Prolonga, además, las restricciones a la movilidad de los ciudadanos de acuerdo con su número de Documento Único de Identidad (DUI) y la paralización del transporte colectivo.
La reapertura económica, además, la traslada para el 15 de junio, a diferencia de lo propuesto por los diputados que la reiniciaba este 8 de junio.
La Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) ordenó al Gobierno y a los diputados coordinar la entrada en vigencia de una nueva ley de emergencia y reinicio de las actividades económicas.
Sin embargo no pudieron acordar el 100 por ciento de la ley sino que chocaron, principalmente, en un punto: la fecha de reinicio de las actividades económicas.
Bukele se negó a flexibilizar el 15 de junio como su fecha límite.