Una mujer con 36 semanas de embarazo y con 4 pruebas negativas de coronavirus (COVID-19) deberá ser enviada a su vivienda desde el centro de contención en el que se encuentra retenida, tras una medida emitida por la Sala de lo Constitucional.
Dicha Sala conoció el caso tras la presentación de un recurso de habeas corpus y entre sus medidas cautelares ordenó que esta mujer, identificada como «ANMG», debe ser enviada a su hogar tras permanecer al menos 37 días en cuarentena y con cuatro pruebas negativas de la enfermedad.
«La solicitante sostiene que el 15 de abril de 2020 fue a pasar consulta al Hospital de Maternidad por tener baja presión. Luego de decirle que estaba bien de la presión la llevaron a una habitación sola, donde las enfermeras y otras personas eran alejadas de ella. La tuvieron en ese lugar por más de 7 horas y le manifestaron que le practicarían una prueba de COVID-19 y la trasladarían al Hospital Amatepec, cuando consultó por qué, le dijeron que por ser sospechosa de portar el virus, lo cual le pareció raro porque no tenía ningún síntoma», dice el documento de la Sala en el que resume el caso.
Sala emite resolución en el Habeas Corpus 466-2020, la cual puede consultarse en https://t.co/9F44BLj61q
— Sala de lo Constitucional (@SalaCnalSV) June 4, 2020
Así, esta mujer con fecha próxima a dar a luz, permaneció nueve días en el Amatepec, luego de un engorroso proceso de espera para ser admitida en el nosocomio, ya que ni siquiera presentaba síntomas de COVID-19.
Luego, fue enviada al hotel Villa Antigua de San Salvador, en donde se le hicieron más tests, al punto que, entre las pruebas del Amatepec y el albergue en la capital, acumuló cuatro tests negativos.
La Sala argumenta que esta mujer estuvo expuesta a contagiarse de coronavirus en el albergue, además que su bebé no tiene el peso ideal debido a que la comida que le dan no es suficiente.
«Si bien le proporcionan atención médica, le realizaron un ultrasonido y los doctores le manifestaron que su hijo está bajo de peso ya que no le dan suficiente comida y que la proporcionada no lleva los nutrientes que ambos necesitan, relata que la doctora le sugiere que tome mucha agua pero que eso le causa más hambre», según explica el texto de la Sala.
Ante esta situación, el Supremo salvadoreño designó a la Jueza Noveno de Instrucción de San Salvador, Nora Victorina Montoya Martínez, para que intime a la autoridad encargada del hotel Villa Antigua y al director del Hospital de Maternidad por su proceder en el caso de la mujer embarazada.
Además, la Sala decretó «a favor de la citada señora la medida cautelar descrita en el considerando V de este auto y, en consecuencia, ordénase a la autoridad referida en el número precedente que dé cumplimiento a ella de la forma descrita en esta resolución, llevándola inmediatamente a su residencia para que guarde cuarentena domiciliar».
La Sala también solicita a la autoridad encargada del hotel Villa Antigua que en un plazo de 24 horas después de la notificación mande un informe de cumplimiento de la medida cautelar, en particular de la liberación de la mujer embarazada en cuarentena.