El Salvador
miércoles 27 de noviembre de 2024
Nacionales

Centros Penales confirma 141 reos contagiados de COVID-19

por Redacción


Unos 637 descartados como nexos.

Entre el 10 y el 15 de junio el número de privados de libertad contagiados de coronavirus aumentó de 108 a 145 de los cuales nueve están hospitalizados, según confirmó Osiris Luna Meza, director general de Centros Penales.

Mientras, la Dirección General de Centros Penales (DGCP) descartó el contagio de la enfermedad en 637 reos porque no desarrollaron ningún tipo de síntomas.

Los reos mayores de edad y que sufren enfermedades crónicas, entre 600 a 700, fueron trasladados a la Penitenciaria Occidental para evitar que se contagien.

Además, 45 empleados de Centros Penales fueron confirmados con COVID-19. La primera cifra era de entre 17 a 20.

Luna Meza explicó en declaraciones a la prensa que Centros Penales realiza la prueba de la enfermedad a todos los empleados y solo pueden entrar al turno hasta que son confirmados negativos. Cuando han sido confirmados como positivos los remiten, según él, para comenzar a medicarlos.

También explicó que la Dirección se ha reunido varias veces con representantes de la Unidad de Ingeniería de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) para coordinar la realización de audiencias vía telemática. Dijo que por el momento es mejor mantenerla con ese método.

“No las queremos hacer de manera presencial”, afirmó.

El 10 de junio José Apolonio Tobar Serrano, procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, explicó que tenía informes en los que se contabilizan unos 108 privados confirmados enfermos de coronavirus.

Anteriormente Centros Penales había dicho que los casos se registraban, principalmente, en los siguientes centros: en el penal de San Vicente, en Quezaltepeque y en el centro penal La Esperanza, en Mariona, San Salvador.

En un primer momento las autoridades identificaron más de 1 mil 63 reos que pudieron haberse contagiado.

Esa cifra, sin embargo, quedó descartada y el número de sospechosos disminuyó a unos 426.

Los casos sospechosos también estaban en los mismos centros penitenciarios de mediana seguridad en los que están recluidos pandilleros integrantes de la Mara Salvatrucha (MS-13) y el Barrio 18.