María Nidia Torres Sánchez, de 28 años, se encontraba el pasado domingo junto a su pequeña hija de 4 en su vivienda situada en el caserío Arena, del cantón Huertos, de Ilobasco, Cabañas, cuando tomó la terrorífica decisión: envenenar con gramoxone —herbicida que se utiliza para la quema de maleza— a la niña y posteriormente intentar suicidarse con el mismo veneno.
Hasta ese momento todo había salido como lo planeó la joven madre; Sin embargo, sus planes macabros no terminaron como ella quería. Cumplió su cometido de acabar con la vida de su hija, pero ella quedó con vida.
De acuerdo con una fuente policial, la menor de edad fue trasladada de emergencia hacia el Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom en San Salvador, pero debido a la gravedad, falleció en el camino.
Este cuadro no fue el mismo para Torres Sánchez, ya que ella sí logró llegar a un hospital de la localidad para recibir atención médica. La mujer se encuentra bajo custodia policial por este hecho.
Hasta el momento se desconocen los motivos que orillaron a la joven para que tomara esta drástica decisión.
Se espera que tras recuperar la salud, María Nidia sea llevada ante un juez para que enfrente cargos por el delito de homicidio agravado.