El Juzgado Especializado de Sentencia”C” de San Salvador condenó a 33 años de prisión al pandillero Miguel Ángel Pérez Deodanes, de 22 años, quien estaba siendo procesado por los delitos de homicidio agravado y agrupaciones ilícitas.
De acuerdo con el expediente judicial, el pandillero mató y enterró en un cementerio clandestino a Alcides Antonio Pérez Ramos.
El crimen fue perpetrado en el año 2013, detalló un testigo. El pandillero mató, amarró de las manos a la víctima y posteriormente la enterró en un cementerio clandestino.
El pandillero fue condenando a cinco años de cárcel por el delito de agrupaciones ilícitas y a 28 años por el delito de homicidio agravado.
El juez valoró todas las pruebas que presentó el Ministerio Público para dar una sentencia condenatoria.