La Fiscalía General de la República (FGR) ordenó la captura del hijo y la esposa del exalcalde de Apopa, Elías Hernández, por delitos de corrupción como cohecho y soborno.
Entre los detenidos se encuentran los abogados Juan Ramón Rivas y Luis Fernándo Monge. También capturaron a dos empleados judiciales, un médico y un fiscal. La Fiscalía informó que en total son 14 personas detenidas de un total de 22 órdenes de captura.
María Evelinda Serrano de Hernández, esposa del exalcalde de Apopa, es acusada por los delitos de fraude procesal, soborno, negociaciones ilícitas y peculado. Mientras que el hijo, Darwin Elías Hernández, es acusado por los delitos de fraude procesal y soborno.
El exalcalde fue detenido el 5 de junio de 2016 acusado de proveer una serie de beneficios a las pandillas en el municipio de Apopa.
Tras la captura se allanó la alcaldía y se pudo incautar documentos que darían cuenta de estos nexos, además de arrestar a empleados pertenecientes a dicho grupo criminal.
Al edil, quien dentro de la pandilla era conocido por los alias “Don Elías” o “El maistro”, se le acusó de delitos como homicidio agravado, agrupaciones ilícitas y amenazas con agravación especial.
En febrero de 2018, el exalcalde fue condenado a 12 años de cárcel por asociaciones ilícitas.
Otros pandilleros procesados junto al exalcalde Hernández, acusados de integrar una estructura que aterrorizaba a los residentes de Apopa, fueron condenados a penas que van de los 3 a los 25 años de cárcel.
En julio de 2018, el Juzgado Especializado de Sentencia “C” de San Salvador absolvió a Hernández por el supuesto intento de homicidio en contra de su exmotorista el 16 de junio de 2013.
De acuerdo con la acusación fiscal, Hernández ordenó el asesinato del exempleado de la comuna, pero la víctima sobrevivió y fue llevado al Hospital Rosales, donde la Policía le tomó declaración, la cual constituyó buena parte del requerimiento fiscal en contra de Hernández y una estructura de pandilleros.
Según la Fiscalía, el ataque contra el exmotorista habría sido en represalia porque este había publicado en internet fotografías del hijo del exalcalde en las que aparecía vestido de mujer.
La defensa pidió que el testigo rindiera declaraciones en la vista pública, pero se alegó que fue imposible localizarla.
Finalmente el juez absolvió al exalcalde debido a que no encontró prueba directa que comprobara que este había dado la orden para cometer el ilícito, esto debido a que la víctima se negó a declarar.