El Salvador suma 554 homicidios en lo que va de 2019, lo que representa una baja de un 21,4 % respecto al año pasado, informó este domingo un portavoz de la Policía Nacional Civil (PNC).
Entre el 1 de enero y el 9 de marzo se registraron 554 muertes, frente a las 705 computadas en el mismo lapso del año 2018, indicó la fuente.
La corporación policial señaló que, sin detallar las razones de la baja, con estas cifras el promedio diario de homicidios se ubica en 8,2 y que en lo que va de marzo se han reportado 59 crímenes.
Por otra parte, el portavoz de la PNC informó de que el número de feminicidios se redujo en aproximadamente 22 por ciento al pasar de 82 muertes entre el 1 de enero y el 9 marzo de 2018 a 64 en el mismo período de este año.
Esta baja en los homicidios se da después de que el país experimentó un período de alza en las primeras semanas de enero, situación generada por una «acción deliberada» de la pandilla Mara Salvatrucha (MS13), según lo aseguró el director del cuerpo de seguridad, Howard Cotto.
Esto llevó al Ejecutivo a suspender las licencias a los policías para incrementar los operativos de seguridad en las comunidades con presencia de estructuras criminales, cuyo accionar afecta principalmente a jóvenes y a mujeres.
El Gobierno salvadoreño responsabiliza a las pandillas MS13, Barrio 18 y otras minoritarias de los índices de homicidios de entre 103 y 50,3 por cada 100.000 habitantes entre 2015 y 2018, cifras que ponen a la nación centroamericana como uno de los países más violentos del mundo.
Las pandillas, un fenómeno considerado como herencia de la guerra civil (1980-1992) y que se fortaleció con la deportación de pandilleros de Estados Unidos, han resistido a los planes de seguridad implementados en las últimas cuatro administraciones.