El Juzgado Quinto de Paz de San Salvador decretó este viernes detención para el expresidente Mauricio Funes, por la divulgación del Reporte de Operaciones Sospechosas (ROS) en el caso expresidente Francisco Flores. El juez también giró orden de captura contra el exfiscal Diego Balmore Escobar Portillo y para el periodista Lafitte Fernández Rojas.
La acusación fue presentada por la Fiscalía General de la República (FGR) el pasado 4 de enero. De momento ninguno de los tres acusados ha sido capturado. A la audiencia inicial no se presentaron ni los imputados ni los defensores de estos.
Con la decisión del juez Quinto de Paz, el expresidente Funes suma cuatro órdenes de captura.
El reporte fue divulgado por Funes a finales de 2013 en televisión nacional. De acuerdo a lo detallado en aquella ocasión por el entonces mandatario, este reporte fue emitido por el International Bank of Miami en septiembre de ese año y luego fue remitido a una instancia ligada al Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
Dicho reporte vincula al fallecido expresidente Flores con una serie de movimientos bancarios en los que se habrían desviado $10 millones de donativos del gobierno de Taiwán, entre 2003 y 2004. Gracias a este reporte, Flores enfrentó la justicia por delitos de corrupción.
El reporte fue enviado a la Unidad de Inteligencia Financiara (UIF) de la Fiscalía, instancia que cuestionó la divulgación del documento por parte del expresidente Funes, quien en su momento dijo que personal de la administración del entonces fiscal general Luis Martínez, le habría facilitado el acceso al documento.
De acuerdo con la acusación presentada por la Fiscalía, en 2013 el entonces fiscal Luis Martínez autorizó la contratación de Diego Escobar como asesor encargado al caso CEL-ENEL. En dicho caso apareció señalado José Antonio Rodríguez Rivas, cuñado del expresidente Flores.
Esto llevó a Escobar a pedir al entonces jefe de la UIF, Tovías Menjivar, pedir investigar a Flores y tramitar información financiera a través del Grupo de Acción Financiera del Caribe (GAFIC). Fue por medio de esta entidad que se consigue el ROS, el cual llega en septiembre de 2013 a manos de Escobar, quien enseguida convoca a su equipo de trabajo en el caso CEL-ENEL para delimitar como proceder en el mismo.
Esta comisión se declaró incompetente de proceder y Diego Escobar decidió renunciar a participar en la investigación del caso, pero teniendo consigo el acceso al ROS. Según la Fiscalía, el abogado se reunió en primer lugar con Lafitte Fernández Rojas para informarle sobre la existencia del documento y el contenido del mismo
De acuerdo con el requerimiento fiscal, Fernández Rojas, al darse cuenta lo que implicaba el documento, decidió contactarse con el ex entrevistador y por entonces socio de Funes, Jorge Hernández, para gestionar una audiencia con el entonces gobernante, a quien le habría planteado la situación e intercedido por protección para Escobar.
Al concretarse las condiciones, Escobar accede a entregarle el ROS a Fernández y a cambio este lo saca del país a refugiarse en una finca de su propiedad en Costa Rica, según la Fiscalía. Ya con la información en sus manos, Funes reveló detalles del mismo, pese a los reclamos de la Fiscalía.
Mediante un comunicado en 2018, la Fiscalía recordó que fue la divulgación de ese documento confidencial por parte del expresidente Funes, lo que llevó a El Salvador a enfrentar un proceso legal a nivel internacional que se ventiló en el grupo Egmont desde el año 2014, y esa fue una de las razones por la cual El Salvador fue expulsado de ese conglomerado en 2018.
El fiscal del caso detalló que debido a la naturaleza de la investigación, se ha solicitado al juzgado Quinto de Paz la reserva total en el caso.