El fiscal general Douglas Meléndez aseguró la mañana de este martes que la vía de la extradición es aplicable en el caso del expresidente Mauricio Funes.
El exmandatario se encuentra asilado en Nicaragua desde hace más de dos años. En El Salvador tiene dos procesos abiertos por delitos de corrupción y los jueces han girado orden de captura en su contra.
“La extradición es posible porque los asilos tienen que llenar sus requisitos y los asilos no son para personas investigadas o procesadas con orden de captura”, esgrimió el fiscal general.
Mauricio Funes ha manifestado en distintas ocasiones que no puede ser extraditado porque goza de un asilo político. Fue en septiembre de 2016 que el gobierno de Daniel Ortega le concedió el asilo político.
El fiscal general indicó que en los dos casos penales contra el expresidente Mauricio Funes han iniciado un proceso de extradición.
“En el segundo caso también nos estamos yendo vía extradición, no precisamente por la difusión roja, que es donde se tuvieron los inconvenientes desde el principio”, explicó.
Agregó que han pedido explicaciones a la Policía Internacional (Interpol) sobre las trabas para ejecutar la difusión roja contra el expresidente.
“Hemos hecho algunas indagaciones en el tema de la primera difusión, ¿qué fue lo que pasó? Hemos recibido algunas documentaciones de gente de la Interpol y estamos pendientes de una reunión con el ministro de Justicia sobre ese tema… pareciera que en el tema de la difusión roja vía Interpol hay un tema de confusión, como que ha llegado información a ellos que se trata de una persecución política cuando no la hay”.
El expresidente Funes, quien se encuentra asilado en Nicaragua junto a sus hijos y su pareja, está siendo investigado por dos casos de corrupción: el primero es por desviar más de 350 millones de dólares para beneficio personal y de terceras personas; y, en el segundo proceso es acusado de formar parte de un grupo de personas implicadas en una trama de sobornos al interior de la Fiscalía, desmantelada mediante la llamada “Operación Corruptela”.
Funes es acusado de pagar unos 935,000 dólares al exfiscal Luis Martínez para evitar la investigación por la tregua entre pandillas, por la construcción irregular de la presa El Chaparral y otros casos.
En los dos casos tiene orden de captura.