El exfiscal General de la República, Luis Martínez, fue notificado la mañana de este miércoles de liderar una red de corrupción al interior del Ministerio Público que se encargó de “vender justicia” y “prostituir a la Fiscalía”, según palabras del actual fiscal Douglas Meléndez.
Martínez es acusado de cometer los delitos de peculado, lavado de dinero, cohecho, falsedad documental, omisión de la investigación y negociaciones ilícitas; según informó la Fiscalía.
La intimación se realizó en la sala de audiencias del Centro Judicial Isidro Menéndez, en donde enfrentaba una diligencia judicial por divulgación de grabaciones en contra del sacerdote Antonio Rodríguez, conocido como Padre Toño.
Martínez, evidentemente molesto y perturbado por las nuevas acusaciones judiciales en su contra dijo ser víctima de una persecución política.
“Hay persecución política, hay dos tipos de delitos los reales y los imaginarios”, dijo molesto.
Además aceptó cometer errores en su administración pero intentó justificar sus actos recalcando que se responsabiliza de “los errores haya cometidos pero no de los delitos”. También añadió nunca haber dudado “que cuando llegara este momento prevalecería la verdad y la justicia frente a las repugnantes mentiras y recuperaría mi libertad”.
Luis Martínez calificó a las nuevas acusaciones como casos construidos por “odio y venganza”.
EL martes pasado la Fiscalía General de la República reveló una nueva red de corrupción, esta vez al interior del Ministerio Público, y liderada por el extitular de la referida institución, Luis Martínez.
“Era una estructura paralela que vendía justicia”, dijo Meléndez, al revelar que fue una investigación exclusiva de la FGR.
La Fiscalía General de la República informó sobre la captura de miembros de la estructura de liderada por Martínez, así como de empresarios y exfuncionarios que se sirvieron de dicha red para evitar procesos judiciales.
Entre los que estarían vinculados a la red se encuentra el expresidente Mauricio Funes y en un nuevo caso de corrupción con el exempresario Enrique Rais.
Actualmente solo Luis Martínez se encuentra encarcelado. El expresidente Mauricio Funes y Enrique Rais se encuentran prófugos de la justicia.
Otras de las personas acusadas son el exfiscal adjunto, Edgar Márquez; el exgerente general, Mauricio Antonio Yanes; el exgerente de recursos humanos, José Dolores Zelaya. También los empresarios Hugo Blanco Rais, Moisés Torres, Aldo Parducci, Jorge Nájera y otras personas más.
La Fiscalía ha denominado el nuevo caso “Operación Corruptela”. Los mencionados serán acusados por los delitos de lavado de dinero, peculado, cohecho y otros.
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Los detenidos han sido identificados como Mauricio Antonio Yanes Morales, quien es acusado por el delito de peculado, negociaciones ilícitas, lavado de dinero y de activos; José Dolores Zelaya Mendoza, por peculado en grado de participación como cómplice necesario y peculado como autor directo; Jorge Moisés Nájera Aguilar, por lavado de dinero y activos; Nelson Humberto López Jiménez, por lavado de dinero y de activos y comisión por omisión; Cesar Augusto García Barrera, por peculado en grado de participación como cómplice necesario, y Carla Francesca García Rossi de Martínez, esposa del exfiscal general, por lavado de dinero y de activos.
Durante el operativo, la Policía Nacional Civil (PNC) incautó documentación variada, seis vehículos, una moto, celulares, equipo informático, cinco armas largas, cuatro pistolas, tres revólveres y dinero en efectivo.
Entre los casos que Martínez se aprovechó para vender justicia se encuentran el del expresidente Mauricio Funes que compró al exfiscal Martínez para evitar investigaciones en su contra. Así lo explicó este martes el jefe de la Unidad Financiera de la Fiscalía General de la República, Jorge Cortez.
De acuerdo con la investigación, Luis Martínez recibía dádivas, que oscilaban entre los 10 a 20 mil dólares mensuales, de parte de Mauricio Funes para recibir protección y no ser investigado en casos de corrupción como el de la tregua entre pandillas y El Chaparral.
A cambio de no ser investigado, Mauricio Funes le proporcionó a Luis Martínez, entre otras cosas, tres vehículos de lujo: una camioneta blindada BMW, un Mercedes-Benz que estaba a nombre de Ada Michelle Guzmán (compañera de vida de Funes) y un Mercedes-Benz convertible.
Además, le entregaba entre 10 y 20 mil dólares mensuales. Para la entrega del dinero, Luis Martínez se reunía con Mauricio Funes en una casa número 76 de Cumbres de la Escalón.
“Ahí se reunía Luis Martínez para solicitarle (a Mauricio Funes) dádivas. Le pedía dinero para viajar y Funes se lo daba en efectivo”.
Cierta parte del dinero se lo entregaba Miguel Menéndez, mano derecha de Mauricio Funes conocido como Mecafé. En 2016, Diario 1 publicó un video donde se observa a Mecafé entregando dinero a Luis Martínez.