El Juzgado de Paz de Olocuilta envió este sábado a prisión a Henry Salazar Burgos, acusado por los delitos de feminicidio agravado y aborto sin consentimiento en perjuicio de su novia Lilian Méndez.
La Fiscalía afirmó que Salazar mató a su novia debido a que la joven no quiso abortar al bebé. El imputado no quería al hijo que había engendrado con la víctima porque mantenía una relación formal paralela.
De acuerdo con el Ministerio Público, la relación entre Salazar y Méndez se volvió tensa después que ella le pidiera una ayuda económica de $75 dólares quincenales, pese a que él insistiera en la interrupción del embarazo. Esto ocasionó la ira de Salazar quien planificó en asesinarla.
Además, la víctima empezó a vivir una situación de constantes humillaciones e incluso llegó a pagar la comida durante las salidas que tenían juntos, indicó la Fiscalía.
El cuerpo de Méndez fue encontrado el 21 de octubre de 2017 en el kilómetro 29 de la autopista a Comalapa, jurisdicción de Olocuilta, departamento de La Paz, con signos de estrangulamiento.
Un día antes, sus familiares informaron la desaparición de la joven ante la policía y difundieron su fotografía en redes sociales con la finalidad de encontrarla con vida. Incluso, los familiares le preguntaron a Salazar sobre el paradero de Méndez y él respondió que la dejó en la terminal del Sur.
Sin embargo, la Fiscalía señaló que las videocámaras registraron el vehículo de Salazar en las cercanías a la escena del crimen.
Si es encontrado culpable, Salazar cumplirá una condena entre 20 a 35 años de prisión por el delito de feminicidio agravado y una sentencia de 4 a 10 años por el delito de aborto sin consentimiento.