Silvia Bonilla, uno de los abogados del exempresario de la basura Enrique Rais y prófugo de la justicia, ofendió al Fiscal General de la República, Douglas Meléndez, a quien acusó de pretender “amansar” a los jueces.
A través de su cuenta en Twitter, el Ministerio Público externó “extrañeza que en casos mediáticos o de combate a la corrupción conozcan jueces suplentes o interinos”.
Bonilla, quien también ejerce como juez suplente, agregó: «Creo que es una estrategia de un fiscal que está derrotado… un fiscal incompetente», que no tiene ni la habilidad para expresarse correctamente en televisión”, de acuerdo con El Blog.
Diario1 consultó con varios abogados conocedores de la materia para tener su opinión sobre este agresivo ataque de la abogada defensora del prófugo Enrique Rais. “En mi opinión, la colega está mostrando un alto nivel de frustración, ya que el señor Rais anteriormente estaba acostumbrado a tener comprado a jueces y a fiscales y como que ahora no lo ha logrado con este Fiscal General”, aseguró un abogado.
Otro abogado señaló que también Bonilla insultó a los jueces en general, debido a que con el calificativo “amansar” se refirió a ellos como animales. “Solo a los animales se puede amansar”, subrayó. Y añadió que esa “es una total falta de respeto a sus colegas jueces”.
En otra publicación en el sitio web La Noticia, la abogada aseguró que el fiscal general es “como un diosecito cuando sube al sexto nivel del edificio de Santa Elena y sabe que tiene el poder de apresar hasta el mismo presidente de la República, pero se le está pasando la mano”.
Y agregó: “Creo que es una estrategia de un fiscal que está derrotado, ante un fiscal que es la burla de todo un país, ante un fiscal incompetente, ni siquiera tiene la soltura o habilidad de poder expresarse correctamente en televisión”.
Sobre estos calificativos, el abogado mencionado dijo que en vez de irrespetar la figura del fiscal general, Bonilla –quien en una parte del proceso también fue abogada del expresidente Antonio Saca, quien guarda prisión por desviar más de 250 millones de dólares del erario público− debería dedicarse a “aconsejar a su defendido que se entregue a la justicia y enfrente los cargos en el país; no seguir tratando confundir con cortinas de humo para distraer la atención”.
El prófugo Enrique Rais
Enrique Rais es un cuestionado empresario. A inicios del milenio fue procesado penalmente. En agosto de 2016 volvió a ser capturado por los delitos de corrupción. La Fiscalía lo acusó de haber comprado funcionarios del Estado para atacar a sus enemigos: dos canadienses con quienes se disputa el relleno sanitario MIDES y otras personas de ese entorno. El exfiscal Luis Martínez fue uno de sus aliados. También, según la Fiscalía, compró a un juez y a empleados del Instituto de Medicina Legal.
Recientemente, el nombre del exempresario de la basura salió nuevamente a la luz pública. Rais habría realizado una maniobra en la Asamblea Legislativa a través de la diputada Cristina López, quien presentó una pieza de correspondencia para que los legisladores aprobaran una interpretación auténtica al artículo 23 de la Ley Especial para la Intervención de las Telecomunicaciones.
Con esa interpretación, Enrique Rais se confeccionó un “traje a la medida” para buscar destruir las pruebas en las escuchas telefónicas que tiene la Fiscalía tiene en su contra, en las cuales se evidencia la descarada trama de falsedades, manipulaciones y corrupción.
En esas grabaciones se escucha al propio Enrique Rais y sus abogados comprar jueces, sobornar testigos y fabricar pruebas falsas para favorecer sus intereses en contra de sus adversarios, incluyendo a los empresarios canadienses a quienes presuntamente Rais estafó y les arrebató fraudulentamente sus acciones de la empresa de propiedad mixta de procesamiento de basura Manejo Integral de Desechos Sólidos (Mides).
El 13 de enero de este año se cumplió un año desde que el empresario de la basura Enrique Rais decidió no afrontar la justicia salvadoreña y convertirse en prófugo. Huyó del país horas después que el Juzgado Octavo de Instrucción de San Salvador girara orden de recaptura en su contra. Meses antes, en agosto de 2016, había sido acusado por los delitos de falsedad ideológica, fraude procesal y cohecho activo. Lo señalaron de ser el cabecilla de una estructura que “compraba justicia” para afectar a terceros en diferentes procesos penales.
Según una publicación de La Prensa Gráfica, Rais llegó a Guatemala y voló en su avión privado N54HT, propiedad de Rais Group International NC LLC, hacia República Dominicana el viernes 13 de enero de 2017. Esta versión fue ratificada por la Fiscalía.
La Policía Nacional Civil (PNC) aún no ha dado respuesta sobre el paradero de Enrique Rais. Tampoco saben justificar por qué su nombre no aparece publicado en la lista de los buscados por la Policía Internacional (Interpol).