Ocho de cada diez niñas y adolescentes entre 10 y 19 años que se embarazan en El Salvador abandonan sus estudios, aseguró este lunes un informe del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
De 25,584 niñas y adolescentes embarazadas en 2015, 10,131 se encontraban estudiando al momento de experimentar un embarazo, de éstas «7,900 abandonaron la escuela y 2,231 permanecieron en sus estudios», reveló el informe titulado El Costo económico del embarazo en niñas y adolescentes.
«El embarazo en niñas menores de 15 años (precoz) y entre los 15 y 19 años (temprano), configuran un problema para El Salvador desde diversas dimensiones incluyendo (lo) social, sanitario, educativo, cultural y económico», añade el documento
Para el representante del Fondo de Población en El Salvador, Hugo González, «la maternidad (de las niñas) le afecta a la sociedad en su conjunto», porque las niñas cuando llegan a su vida laboral se quedan en el sector informal con ingresos precarios.
El estudio, que determina el impacto económico para el Estado salvadoreño de los embarazos, estableció que en 2015, un total de 25.584 niñas y adolescentes asistieron a control prenatal en establecimientos del ministerio de Salud, que por ley brindan atención gratis.
La cifra podría ser mayor debido a que existen otros proveedores de salud a los cuales pueden asistir las embarazadas.
El Estado salvadoreño invirtió hasta 2015 un total de 27.6 millones de dólares en la educación acumulada de las 7,900 niñas y adolescentes que desertaron de diferentes niveles.
Centroamérica es la cuarta subregión a nivel mundial con mayor prevalencia de embarazo entre adolescentes después de África del Este, Oeste y Central.