El único parte brindado por la Fiscalía General de la República (FGR) acerca de un allanamiento en una fábrica procesadora de alimentos ubicada en Nuevo Cuscatlán, La Libertad, fue un tweet en el que se aprecian una fotografía de las instalaciones de la fábrica y el motivo del allanamiento de la misma.
Según el Ministerio Público, en un camión remolcador que se dirigía a esta empresa fueron ubicados 208 kilogramos de droga, los cuales se encontraban junto con un cargamento de gelatinas en polvo.
Este hallazgo propició el allanamiento de la empresa denominada Sabores Cosco de Centroamérica, sin que de momento la Fiscalía haya dado parte de los resultados de la incautación.
La sociedad en cuestión se dedica a la elaboración de gelatinas, coberturas artificiales para golosinas congeladas, refrescos en polvo y otra serie de alimentos procesados. Su base de operaciones se encuentra junto a otras empresas en la zona industrial ubicada en la carretera que conduce a las playas del departamento de La Libertad.
En la última semana las autoridades de seguridad, en coordinación con otras entidades, han incautado más de 1,200 kilogramos de droga transportada o almacenada de diversas formas.
La madrugada del 30 al 31 de mayo pasado se incautó 840 kilogramos de cocaína acondicionada en lanchas, que fueron interceptadas en aguas costeras del departamento de Sonsonate.
En el operativo se arrestó a Jorge Marroquín, hermano de Roberto Marroquín, alcalde de la ciudad de Moyuta, departamento de Jutiapa, Guatemala. Dicho funcionario es señalado en diversas investigaciones como un movilizador de droga en un corredor fronterizo con El Salvador y Honduras, además de ser el archienemigo de Marixa Lemus “La Patrona”, una temida sicaria acusada de trabajar en coordinación con cárteles de la droga en el país fronterizo.
“La Patrona” fue capturada la semana pasada en El Salvador, días después que se fugara de una prisión militar en las afueras de la capital guatemalteca. Fuentes policiales manejan que la sicaria era respaldada por estructuras de narcotráfico en el occidente del país.
La droga que estaba tasada en unos $21 millones, es la máxima incautación de estupefacientes en la historia de la Fuerza Naval salvadoreña.
Horas más tarde fueron incautados otros 204 kilos de cocaína en un contenedor en la zona del Puerto de Acajutla, los cuales no se logró determinar preliminarmente su procedencia, al igual que el cargamento incautado el viernes en las cercanías de la fábrica Sabores Cosco.
Los anteriores hechos hablan del creciente poder e influencia de las bandas de narcotráfico, que por años había pasado desapercibido en el país.