El Salvador
sábado 23 de noviembre de 2024

Así explica Estados Unidos la facilidad para lavar dinero en El Salvador

por Redacción


Departamento de Estado cataloga al país como un importante corredor de droga en su paso desde Suramérica hacia Estados Unidos.

La Oficina Internacional para Narcóticos y Asuntos de Aplicación de la Ley del Departamento de Estado, emitió un reporte sobre la Estrategia Internacional para el control de Narcóticos, en los que describe las vulnerabilidades de una serie de países que permiten que el lavado de dinero sea más fácil. Entre esos países se encuentra El Salvador.

El país fue incluido el jueves en la lista de los países que más permiten el lavado de dinero en el mundo. En el análisis que se hace sobre El Salvador, el Departamento de Estado sostiene que el territorio nacional es un importante corredor de droga que va de América del Sur hacia Estados Unidos, así como del dinero que viene desde Estados Unidos hacia América del Sur, debido a dicha actividad.

El Departamento de Estado establece que no existen mayores regulaciones en el sistema financiero, y que entre otras cosas, se carece de un sistema de inteligencia financiera independiente, que además no puede lograr un debido proceso de intercambio de información con el resto de países centroamericanos.

“Si bien la Unidad de Inteligencia Financiera no está sujeta a manipulación política, la unidad ha sido comprometida por anteriores fiscales generales y se mantiene vulnerable a cualquier tipo de manipulación en el futuro”, dice un extracto del informe.

El documento agrega que su ubicación geográfica y una economía dolarizada, vuelven al país en un sitio ideal para organizaciones criminales. Continúa diciendo además que el lavado de dinero está primariamente relacionado con el narcotráfico y el crimen organizado.

“De acuerdo con las autoridades, los grupos criminales lavan dinero a través de bancos, compañías de fachada, parqueos, agencias de viaje, remesas, agencias de importación y exportación de bienes y servicios de encomienda”, menciona el Departamento de Estado.

A eso añade: “Las actividades ilícitas incluyen el uso de testaferros, que depositan pequeñas cantidades de dinero o la redistribuyen hacia otros rubros, para desviar la atención del gobierno”.

Otro aspecto resaltado por el Departamento de Estado, es que el Programa de Persecución a Crímenes Financieros (FINCEN por sus siglas en inglés) congeló desde 2013 el intercambio de inteligencia con la Fiscalía General de la República, debido a la filtración de un reporte de operaciones sospechosas por parte del presidente Mauricio Funes, que vinculaba al exmandatario Francisco Flores con el desvío de millonarios donativos otorgados por el gobierno de Taiwán.

Al final del reporte, el Departamento de Estado señala que la Fiscalía salvadoreña tiene entre manos cuatro importantes casos de lavado de dinero, entre los que destacó el de una “organización criminal transnacional”, aludiendo a la Operación Jaque”, que en julio de 2016 golpeó el corazón financiero de la pandilla MS13.