La jueza Segundo de Paz de Chinameca instaló esta mañana la audiencia inicial contra de María Arcilla Coreas, de 41 años, abuela de los dos hermanos que murieron calcinados en el cantón San Antonio de ese municipio el viernes 27 de enero.
La jueza decretó instrucción formal, aunque determinó que la acusada enfrentara el proceso en libertad, ya que las pruebas presentadas por la Fiscalía General de la República (FGR) determinan que no existe peligrosidad de la imputada.
Coreas es acusada por la FGR por los delitos de homicidio culposo y abandono y desamparo. La mujer tendrá que esperar a la etapa de instrucción, para saber si es absuelta de cargos.
Según el informe presentado por la Policía Nacional Civil de la localidad, el día de la tragedia, la mujer habría dejado a los hermanos bajo la responsabilidad de una menor de 13 años de edad, mientras la madre se encontraba trabajando.
El siniestro, que fue originado por un corto circuito según el informe del Cuerpo de Bomberos, provocó la muerte de los hermanos Julio Eduardo Pérez y Kenia Erlinda Coreas, de 4 y 2 años respectivamente.
Habitantes de los cantones aledaños a Chinameca se hicieron presentes a los juzgados, para solicitar la liberación de Coreas.