Representantes de la cartera de Seguridad anunciaron este jueves que ya empezaron los procesos para beneficiar a una cierta cantidad de reos con su excarcelación, en respuesta al pedido que el Papa Francisco hiciera el año pasado, el cual fue denominado por el Sumo Pontífice como “Año de la Misericordia y la Paz”.
El pasado 16 de enero, en el acto oficial de la celebración de los 25 años de los Acuerdos de Paz, el presidente Salvador Sánchez Cerén anunció que accederá a liberar presos como muestra de misericordia y en respuesta al pedido de Francisco, por lo que instó a los demás Órganos del Estado a que facilitaran dicho proceso.
De acuerdo con estimaciones del gobierno, se planea beneficiar a 528 reos con una excarcelación, mientras que otros 103 internos en fase de confianza, pasarán a estado de semilibertad.
Durante un foro en el que se trató la temática de los centros penales, las autoridades explicaron que los beneficiados en el plan deben cumplir con estas condiciones: No haber cometido delitos graves, tener voluntad de reinserción y haber cumplido, al menos, la mitad de su pena.
El sistema penal salvadoreño cuenta con 634 privados de libertad en fase de confianza, en la que salen de las prisiones a ejecutar trabajos de beneficio ciudadano; además hay otros 261 en semilibertad, lo cual les permite ir a su casas y emplearse durante el día. En total son 895 personas en los centros penales salvadoreños, los que han probado haberse readaptado después de sus condenas.
Según el Informe sobre Seguridad Ciudadana en las Américas, elaborado por la OEA, El Salvador se encuentra en la primera posición de 34 países, con el mayor porcentaje de ocupación de prisiones en el continente (299%), seguido por Bolivia (233%) y Haití (218%). El total de las prisiones salvadoreñas tienen una capacidad para 8,110 privados de libertad (según datos de 2010), y en la actualidad, según registros recientes de la Dirección General de Centros Penales, habían 33,421 presos, entre procesados y condenados.