A mediados del año pasado iniciaron las investigaciones contra una estructura de narcotraficantes que operaba en toda la región centroamericana, la cual era dirigida por el salvadoreño José de la Cruz Claros Amaya, quien fue agente de la Policía Nacional Civil (PNC). Este fue detenido el miércoles pasado en el aeropuerto internacional La Aurora de Guatemala.
El director de la PNC salvadoreña, Howard Cotto, confirmó que el cabecilla de dicha estructura criminal fue agente de la corporación y estuvo destacado en la delegación de Soyapango, en San Salvador, y en la ciudad de Usulután.
“Confirmamos que este sujeto, José de la Cruz Claros Amaya, fue agente de la Policía Nacional Civil. Él ingresó a la policial el 24 de febrero de 1998 y duró activo en la institución un poco menos de seis meses, porque el 25 de agosto de ese mismo año él abandonó el servicio y su caso fue conocido por el tribunal disciplinario de la institución, siendo destituido el 25 de marzo de 1999 por esa falta disciplinaria”, dijo Cotto en conferencia de prensa.
El titular de la PNC aseguró que el pasado 11 de julio la Policía realizó un procedimiento en el que se encontró en un vehículo 122 kilogramos de cocaína, se detuvo a una persona, pero el hallazgo no se hizo público para no afectar las investigaciones.
Aunque no especificó dónde se hizo el hallazgo de la droga y el nombre del capturado por dicho delitos, el funcionario afirmó que el imputado está vinculado con Claros Amaya y era uno de sus colaboradores en el movimiento de droga a nivel nacional e internacional.
“Este caso en realidad inicio el 11 de julio de 2016 cuando se realizó la intervención de un vehículo que tenía encaletado 122 kilos de cocaína. En esa oportunidad fue tenido un sujeto. Nosotros no dimos a conocer públicamente este procedimiento porque nuestra pretensión había sido, ha sido y de hecho fue lo correcto, poder dar con la estructura que estaba involucrada en este tráfico internacional de drogas”, reiteró el director de la PNC.
La Policía afirmó que las investigaciones dieron su fruto y se emitieron varias órdenes de captura contra los narcotraficantes, entre los que se encontraba el expolicía y cabecilla de esta banda.
Sin embargo, a pesar de la orden de detención, Claros Amaya, pudo salir tranquilamente del país con destino a Guatemala, donde fue capturado por agentes de dicho país y luego de chequear que el mismo era solicitado por las autoridades salvadoreñas.
Inmediatamente, la Policía guatemalteca informó a sus colegas de El Salvador sobre la captura del narcotraficante, por lo que se montó un fuerte operativo que concluyó con una serie de allanamientos realizados este miércoles en presencia del fiscal general de la República, Douglas Meléndez.
Una de las viviendas allanadas fue una lujosa propiedad ubicada en Los Planes de Renderos, Panchimalco, donde las autoridades decomisaron varios vehículos, armas de fuego y documentación que supuestamente los involucra en el tráfico internacional de drogas.
En este procedimiento, fueron capturadas nueve personas, pero la Policía solamente reveló la identidad de cuatro de ellas: Teresa Guadalupe Colato Bonilla, Marco Antonio Serrano, Gustavo Mauricio Alvarenga Linares y José Luis Jovel Martinez, todos serán acusados del delito de actos preparatorios de preposición y conspiración con tráfico de drogas.
Cotto aseguró que están realizando las últimas diligencias administrativas sobre la captura de estas personas y que en los próximos días serán presentados ante los medios de comunicación. Asimismo, se conocerán más detalles del caso.
Finalmente, el jefe policial dijo que revisarán los acuerdos bilaterales entre Guatemala y El Salvador para determinar si Claros Amaya será extraditado a territorio salvadoreño.