Con una llamada telefónica de un número desconocido, inició el calvario de un salvadoreño que fue advertido que alguien había pagado un sicario para matarlo, sin embargo, el responsable de hablar el gatillo se compadeció de la víctima y le aseguró que si le entregaba $250 no le pasaría nada.
El pasado 28 de abril, la víctima recibió tres llamadas telefónicas a su celular personal, pero solamente contestó la primera y escuchó la voz ronca de un hombre que le aseguró que alguien quería hacerle daño, que lo habían contratado para matarlo, pero no deseaba concluir con el “trabajo”.
“Si me pagás $250 no te pasará nada”, dijo el supuesto sicario a la víctima, cuya identidad se desconoce por contar con régimen de protección.
El ofendido colgó el teléfono e inmediatamente acudió a la Policía Nacional Civil (PNC) para interponer la denuncia respectiva.
Agentes policiales contactaron al delincuente y tras una negociación acordaron la entrega del dinero en un centro comercial de San Salvador.
Al lugar llegó un hombre que recibió el dinero de manos de policías vestidos de civil. Menos más adelante del lugar de la entrega, el sujeto fue capturado e identificado como Luis Orlando García de 29 años de edad.
El sujeto fue presentado ante los tribunales y acusado del delito de extorsión. El caso estuvo a cargo del Tribunal 6° de Sentencia de San Salvador, el cual lo encontró culpable y lo condenó a cumplir una pena de 10 años y un mes de prisión.