Un hombre de 62 años de edad, en evidente estado de ebriedad, llegó la madrugada de este martes a su vivienda ubicada en la colonia Metropolis II sobre la avenida Bernal en San Salvador, golpeó a su esposa, realizó disparos al aire y se atrinchero al ser confrontado por miembros de la Policía Nacional Civil (PNC).
Según la Policía, el Sistema de Emergencia 911 recibió una llamada de una mujer quien aseguró haber sido violentada por su esposo que se encontraba bajo los efectos del alcohol.
Agentes policiales llegaron a la vivienda y fueron recibidos por el sujeto, quien solamente fue identificado como Ricardo Arnoldo, quien tenía en sus manos una pistola 9 calibre nueve y amenazaba con disparar contra la autoridad.
«Aquí nos vamos a morir todos», gritaba Ricardo , según el testimonio de agentes policiales, mientras la esposa y el resto de la familia se encontraban privados de libertad al interior de la residencia.
Los policías que acudieron a la vivienda del hombre solicitaron apoyo de sus compañeros del Grupo de Reacción Policial (GRP), quienes iniciaron un proceso de negociación para lograr que el hombre se entregara.
«Simple y sencillamente usamos el poder de la palabra. Hablamos por horas con él», dijo uno de los jefes policiales que llegaron al lugar.
Asimismo, el encargado del procedimiento aseguró que optaron por la negociación con el adulto mayor para no arriesgar la vida de los policías y la de los familiares del sujeto .
El jefe policial afirmó que si entraban a la vivienda podía generarse un tiroteo y lo más probable es que los agente mataran al hombre en defensa propia, por ello, buscaron persuadirlo y evitar una tragedia.
Los policías lograron que el hombre se entregara, fue capturado por los delitos de amenaza y disparos al aire de un arma de fuego.
Además, se le decomisó el arma calibre 9 milímetros que tenía en su poder.