El Salvador
lunes 25 de noviembre de 2024

Pandilleros cobran alquiler de casas en vez de los propietarios

por Israel Serrano


Los pandilleros obligan a inquilinos a pagarles a ellos y no a los verdaderos propietarios de las viviendas. Conozca uno de estos casos ocurrido en un municipio al oriente de San Salvador.

El plan “Casa Segura” impulsado por las autoridades ha provocado una mutación en las operaciones delincuenciales de las pandillas. Por ejemplo, ya no es frecuente que se apropien de las viviendas desocupadas en algunas zonas asediadas por esas estructuras, sino que detectan las casas alquiladas y exigen a los inquilinos que a ellos deben pagar la renta.

Ramón, nombre ficticio para esta historia, hace 10 años concretó el sueño de muchos salvadoreños:  tener casa propia para garantizar un techo a su familia. Fue así como tramitó un préstamo con el Fondo Social para la Vivienda  (FSV) para adquirir una casa en una colonia de un municipio al oriente de San Salvador.

El FSV le prestó al hombre $9,500 y tras completar el trámite respectivo le entregó las llaves del inmueble. En ese entonces, según el relato de Ramón,  consideró un lugar adecuado para el desarrollo de su familia y se apagaba a sus posibilidades económicas, pero en los próximos años el lugar fue invadido por pandilleros de la Mara Salvatrucha.

“Muchas veces uno se acostumbra a vivir con los pandilleros. Si no te metes con ellos no te pasa nada”, dijo Ramón al mostrar cierto conformismo con la situación.

Durante una década, este ciudadano pagó al FSV aproximadamente $70 mensuales  en concepto de cuota por su vivienda, crédito que mantenía al día con la esperanza de dejar una propiedad a sus hijos, pero todo ha cambiado y ahora solo desea estar lo más lejos posible del que fue su hogar.

“Todos los días veíamos a pandilleros armados, corriendo de un lugar a otro, controlando quién entra y quién sale de la colonia. Ya no podíamos seguir así”, explicó Ramón luego de afirmar que hace unos meses se mudó con su familia hacia un lugar “menos peligroso”.

Antes de irse del lugar, acordaron con una vecina que le alquilarían la vivienda por un costo de $50 mensuales. Durante los primeros meses no hubo ningún inconveniente y Ramón recibió puntualmente de su inquilina el pago.

Sin embargo, la inquilina le informó que había recibido la visita de pandilleros de la Mara Salvatrucha, quienes le informaron que ellos serían los que cobrarían el alquiler y no el propietario del inmueble.

Al principio, Ramón dudó de la palabra de su inquilina y visitó la vivienda para platicar personalmente con ella y en el trayecto fue abordado por los pandilleros. Y estos le reiteraron la mala noticia.

“La mara cobrará a esa vieja por el alquiler de tu casa”, fueron las palabras que según Ramón le expresaron los delincuentes.

El hombre ni siquiera siguió su camino, no visitó a la inquilina y abandonó la residencial con una sola idea en la mente: jamás regresar al lugar.

“Yo ya di esa casa por perdida. No regresaré nunca”, lamentó Ramón.

El padre de familia aseguró que acudirá a las oficinas del FSV para entregar la vivienda formalmente y librarse del pago mensual de $70 por un lugar en el que no puede habitar.