El Salvador
sábado 23 de noviembre de 2024

Ladrón a víctima: “Si andas fotos de pandilleros en el celular, te mato”

por Redacción


Una joven salvadoreña fue asaltada este fin de semana mientras visitaba la casa de sus padres al sur de San Salvador. Acá su historia.

Gabriela, nombre ficticio de la víctima de asalto, decidió ir a visitar a su madre que reside en un municipio ubicado al Sur de San Salvador, una zona asediada por la Mara Salvatrucha y en la cual solo ingresan personas conocidas o residentes en el lugar.

El sábado, la mujer, salió de su casa ubicada en otro municipio de San Salvador, pero al norte del departamento, donde se mudó luego de formalizar una relación sentimental con el padre de su hijo, pero no imaginó que la asaltarían en el territorio donde ella se siente “segura” por haber nacido y crecido en el lugar.

La joven afirma que algunos de los pandilleros fueron sus compañeros de clases, por los que los conoce casi a todos, sin embargo, se ha mantenido al margen de sus acciones criminales y se dedica a trabajar y estudiar.

Gabriela ingresó al territorio prohibido para algunos, visitó a sus padres, donde permaneció la mañana y la tarde del sábado. Aproximadamente a las 4:00 de la tarde, salió rumbo a su casa, pero a unos metros de la vivienda de sus progenitores fue abordada por un motociclista, quien le pidió detenerse y entregarle su teléfono celular.

“Si andas fotos de pandilleros en el celular, te mato”, fue la advertencia que el conductor de la motocicleta color negra, dijo a la asustada víctima, quien además en ningún momento se quitó el casco que cubría su cabeza y ocultaba su rostro.

El hombre no solamente usó sus palabras para intimidar a Gabriela, también, le mostró un arma de fuego calibre 9 milímetros que tenía en la cintura y prensada con un cincho color café, con la cual atentaría contra su vida de encontrar en su teléfono celular algún vínculo con pandilleros de la Mara Salvatrucha, de lo contrario, le aseguró le regresaría el aparato.

Sin dudarlo, la joven madre, entregó el celular al delincuente. El sujeto inmediatamente comenzó a revisarlo, pero encontró solamente imágenes familiares, ninguno con aspecto de pertenecer a una estructura criminal. A pesar de no encontrar lo que buscaba, el hombre no cumplió sus palabras y se quedó con el aparato.

Aún no conforme, el ladrón armado exigió a la víctima sus aretes, los cuales también entregó, pero se los regresó por ser de “fantasía”, es decir, de bajo valor monetario.

El atracó continuó. El motociclista le ordenó entregarle todo el dinero que portaba. La víctima entregó un billete de $20 y unas monedas.

“Te dejo las monedas para tu pasaje”, le dijo el ladrón a Gabriela, quien tomó las mismas.

Tras quitarle su celular y el dinero en efectivo, el hombre arrancó su motocicleta y se perdió en las curvas de la carretera que de Comalapa conduce a San Salvador. La mujer siguió su camino para encontrarse con su pareja y su hijo que la esperaban en casa.