La inexperiencia, al parecer, le pasó una factura muy cara a un hombre en Morazán, que fue condenado a 30 años de prisión por haber secuestrado a “Romeo”, lo liberó por falta de rescate y posteriormente fue enviado a la cárcel.
Rafael Antonio Barahona Gómez, el pasado 30 de junio de 2011, junto con otros sujetos, secuestró a la víctima -cuyo nombre corresponde a la clave de testigo protegido otorgado por la Fiscalía General de la República (FGR)-, y lo llevaron con rumbo desconocido.
Los criminales se contactaron con la familia y exigieron $5,000 por el rescate; sin embargo, los parientes de la víctima no pudieron hacer efectivo el pago por la liberación debido a la falta de recursos económicos.
Los secuestradores, después de cuatro días de negociaciones y no recibir ni un centavo, decidieron liberar a la víctima, quien posteriormente puso una denuncia ante la Policía Nacional Civil (PNC).
Hace unos meses, Barahona Gómez, fue capturado por las autoridades por lo que fue acusado formalmente del delito de secuestro contra la víctima clave “Romeo”.
El caso llegó a Juzgado de Sentencia de San Francisco Gotera de Morazán, el cual dictó una pena de 30 años de prisión contra el secuestrador.